Cien años de amor, cien años sin ti.
veía ese cuerpo tirado y llena de sangre, era alrededor de las cinco de la tarde, oscurecía y empecé a sentir un frío intenso, no
on manchas, él llevaba puestas unas gabardinas negras, un sombrer
n ese momento pude ver la naturaleza de esa persona que estaba erguido sobre mi cuerpo, palpó en mi cuello si tenía pulso, luego en mis muñecas, al ver que a
se detuvo antes de continuar chupar la
miedo a la muerte, convicción de sobrevivir, mucho odio, _ "baah, asi, con
ó de mi garganta, _ ¡Conviérteme en lo
anhelo, casi su mirada solitaria ce
Lo h
mi boca, con una uñas filosas, abrió su
ntamente vi como las heridas se cerraban y mi piel se
e miró y dijo estás palabras, _ "ya se acercan los humanos, debes esconderte, después aparecerás ante tu padre sano y salvo, te diré esto, el hombre que te traicionó viene delan
bía acerca de mi par
onocer muchas cosas más, lo descubres solo o yo te los explicaré
él levantaba el agua como una gran par
las evidencias de que
mbién descubrirás muchas cosas nuevas de ti mismo, poderes, ya no eres un humano, cuando
os de ello más a
olvió tan enérgico y emanaba una fuerza sobrenatural de mi, mis oídos seguía escuchando como la multitud se ace
primer poder sobre humano, ver atraves de los ojos de mi misterioso nuevo amigo
o lugar lo llenó de miedo, sentí su miedo a kilómetros de distancia, vi como sus facciones se contraían, vi su semblante ponerse pálido para luego ponerse rojo con rabia, vi cómo r
l mismo, pero yo las oía
za la voz del misterioso ho
!, As
porque soy tu hermano, bebiste de mi sangre y
dí mientras una sonrisa
e mi padre y de mí, sin embarg
su padre como su madre vivían, pero éste era un plan tejido desde unos siete años atrás, hacer pasar por muerto a sus padres y fingir ser huérfano
rruinó mi vida, incluso ha matado a un ser tan inoce
ngre empezó a burbujear, e
l escuchó, por qué empezó a dar vueltas y vueltas con su caballo,
ndo loco, pues ya había inventado, según ellos, inventado que yo me había tirado
ios, de no verme allí muerto, aún conservab
yo debía hacerlo sufrir, no permitiría nada de sus ambis