Empezar de nuevo
sintió sobresaltada, a
pero entonces deseó no haberlo hecho, pues la cabeza le da
umbado a su lado completamente desnudo. Al mirarlo notó que, incluso en su estado de flacidez, seguí
en todas las cosas que habían hecho er
xtrañamente, parecían por ello más vivas que de costumbre. Pero, pese a lo deliciosamente ultrajada que se sentía, decidió apresurarse para desaparecer antes de que Liam despertara. Lo últ
de noche y después de ponérselos, ella se levantó de la cama de un salto, luchando con una habitac
abrirlos nuevamente, el suelo había dejado de t
ató de localizar su ropa, ya que su vestido parecía haber desaparecido misteriosamente y su ro
onérsela, pensando que él no la echaría de menos. Cogió su celular y, con sus t
o. Sin embargo, él debió hacerlo, de la misma manera que le quitó el resto de la ropa. No pudo evitar estr
la gabardina y saltaba dentro de sus zapatos. Pues, a pesar de la delirante em
de sostener una pequeña charla con un grupo de completos extraños. Era algo con lo que tenía que vérselas a diario, pero que aquella mañana le parecía del todo imposible. El drama y el esfuerzo
u casa, señorita", dij
espondió Eden, rechazando su oferta
ueden entrar aquí", explicó pac
ada. A menos que los residentes lo autorizaran con el personal de segurida
s órdenes de llevar a los invitado
tranquilizarla, sus palabras
á con lo que le quedaba de sentido común, le había pedido que usara protección. Recordó haber visto los brillantes envoltorios de aluminio sobre el suelo cuando salió de la lujosa habita
orita
izo una mueca al mayordomo, pues se había
estionaba cómo podía permanecer tan tranquila y educada
aría desayunar
abierta. ¿Acaso invitarla a desayunar formaba parte de la "Experiencia Lia
r, era más que evidente que se trataba de algo que hacía todo el tiempo, llevar a casa mujeres al
nico que deseaba era irse de una vez por todas, correr hacia
al para mostrarle el majestuoso Lexus que la esperaba estacionad
e se recostó, deseando poder derretirse en los lujosos as
reguntó Steven, el chofer, captando su
rle: ¡A cualquier par
ía saltado voluntariamente a esa cama, incluso cuando sus amigas se lo advirtieron, incluso cuando él mismo
sas cejas de Steven ha
un Uber que la llevara a su casa, pues cuanto menos tuviera que ver con Liam, mejor. No podía per