Mole de Olla y Traición
n la televisión encendida sin volumen. Las horas se habían arrastrado
en una playa de Oaxaca, sonriendo, abrazados, con el sol poniéndose a nuestras espaldas. Él me había regalado un col
pequeño local de catering, nuestras primeras vacaciones juntos. C
ia casa. Me levanté del sofá. Cuando me vio, su rostro mostró una fugaz sorpresa, seguida de un
jo, no como una pregunta
," respondí, mi voz
uitó los zapatos y caminó hac
toda la sala? Sabes que no me gusta el
do que quería que nuestros recuerdos estuvieran siempre a la vista. "Para no olvid
ro y ostentoso que el que yo le regalé para su cumpleaños. Y olía a un perfume
Lo supe con una certeza
comenté, intentand
or un proyecto exitoso," mi
is manos en su pecho, buscando su calor, buscando al hombre que amaba. Él se tensó
ado, Sofía.
ario," dije, mi voz quebrá
Por un momento, creí ver un atis
nsferí algo de dinero. Cómprate lo que qui
n con dinero. Las lágrimas que había estado c
o, Mateo. Quiero a m
era el de un extraño. Fr
" . Sonó formal, distante, como si estuviera hablando con una socia de negocios. "Ya no so
s a nuestro plan de casarnos el próximo año?
deberíamos esperar. Mi carrera está en un pun
crédula. "¿Nuestra vida junto
able. Me quedé de pie en medio de la habitación, temblando de frío y de dolor, comprendiendo que el hombre con el que había compar