La Hija Firme Del Detective
ras preparaba el desayuno, su mente trabajaba a toda velocidad, buscando una salida, una grieta en la fortaleza que la rodeaba. Recordó las historias de su pad
na forma de
e encerró en el baño con su teléfono. Marcó el número de la base militar más cercana, un número que su padr
Número Siete
emblorosa. "Necesito hablar con el
de la línea. La operadora su
previa. Y su agenda está llena por las próximas tres semana
a desesperación filtrándose en su voz. "Esto es s
ausar un ligero cambio. Hubo ot
glas. No puedo comunicarla directamen
muere". La colgarían, pensarían que era una broma. La frustración la golpeó como un muro. Inc
se rendiría. Si no podía llegar a él por teléfono, iría en
o, forzando la c
. Vio el reflejo de una joven asustada, pero debajo del miedo, había una chispa de la terque
necesita invitación", susurró para s
virtió en su ma
la puerta del baño f
os ahora!", gritó la voz de
s de los hombres de Ricardo. Ricardo iba adelante, junto a Sofía, su novia, una mujer cuya belleza solo era super
Sus ojos se posaron en la mano de Elena, que aferraba c
n una risita burlona. "Parece una tapa de refresco apl
ue pasaban a toda velocidad. Cada palabra de Sofía era como sal en un
nrió. "Déjala, mi amor. Es lo únic
palpable. La humillación e
empre habría gente buena dispuesta a luchar. Y ella iba a encontrarla. En su mente, ya no estaba en esa camioneta. Estaba trazando
guantaría todo lo necesario para poder arrodillarse frente a esas puertas y exigir la justicia que le debían a su padre y a su hermano. La decisión estaba tomada. No ha