Secretos Maliciosos Bajo los Olivos
l trato preferencial de
ayuno a la cama. Cada noche, m
, mi niña. Una mujer s
uerto. Apenas hablaba, y cuando lo hacía, era en susurros. A veces la oía quejarse en v
de mí, uno que no se iba ni durmiendo diez horas. Mis ciclo
omenté
Sofía. Es normal", me di
scar unos proveedores para la boda. El mío se e
raseña es el nombre de
un email que me había enviado. Pero mi
ujer llamada "Elena". El asunto del ú
n el estómago.
n de encuentros secretos, de lo muc
uenta de nada", escribió Mateo. "Pronto todo esto
bra era un golpe. Mi prometido, el h
Mi primer impulso fue gritar
darle esa satisfacción. Si le montaba una esce
ada. Fingir que n
La finca ya no era un hogar, era un