El Uno para el Otro
, pues estaba dispuesta a cualquier cosa, siemp
trimonio y no engañarme; y segundo, debes asumir la responsabilidad de m
ra tener una aventura con alguien, no tenía a ese "alguien". La segunda, básicamente, sig
nny, podía soportarlo; después
no aprovecharte de mí", replicó ella, pero una risa burlona la interrumpió: "He visto cada
jo tierra. Lo maldijo en su mente antes de darse media v
e finalmente se les acercó y les dijo: "Pero si son u
érselo saber, la mujer continuó: "Ese día, en la oficina de Registro Civil, mi esposo y yo también nos estábam
rpemente, pues su rostr
nal de registro dijo que ustedes dos estaban borrachos y que los atenderían cuando estuvieran sobrios. Entonces ust
unas tijeras del escritorio y las puso superficialmente en la muñeca, diciendo que si no los registraban, se cortaría la muñeca dejando salpicar su san
ería no haber sabido nada de lo
abía qué c
sar con él au
abía terminado con Hanson, todavía
despidió tímidamente de la mujer
onio tambalea", dijo él
vorció de él hoy, o de lo contrario,
to, la convivencia como esposo
juntos y compartían sus gustos y
ella mantuvo su mente ocup
Zac salió mu
diendo interés en él, ya que criticaba todo, era exigente e impr
s sus deficiencias podrían ser ignoradas.
o salió, su esposo ya había regresado sigilosamente. Estaba en el balcón
lo, y su brillante luz parecía cubri
bajado del cielo. Sus ojos eran como la estrella más brillante de la noche, capaces
a abierta dejó entrever
exclamó Essie t
ella y una sonrisa picares
ara esconderse en la habitación, pero cuando pasó por el sofá, esta se enredó ine