SE BUSCA NOVIA FALSA. REQUISITO: SER MI MEJOR AMIGA
puestos a entretenerse y pasar un rato agradable, incluyendo los
ya estábamos sentados en lo alto del viejo tanque de agua del pueblo, donde se podí
ue la cena, agregando ese ingrediente especial q
a salsa picante en la mayoría de las cosas que come ―dijo, a
ía manchadas con un poco de salsa. Me quedé a la espera de su respuesta, sin embargo, este solo se carcajeó ante mi inocente insistencia y yo t
m con ese tono de voz nostálgico que usualmente usaba pa
reí mientras limpiaba los últimos restos de salsa de mi boca, luego tomé un s
ñas viv
y las cosas que están dentro de mi de
acotó el chico a mi lado, buscando entrometer
nta que contarle una parte solo arrastraría todo el cuento e
la verdad ―hablé sin muc
in algo de información, pasamos más de tres años si
o confundida por lo qu
de ti? ¿
llegado. Ahora que lo pienso bien, volvimos a tener contac
que acertadas, pero yo
ad y debía irme cuanto antes. ―Zanjé el tema con un sabor amargo en
raciad
s, pero algún día m
spiré de
a que se hallaba detrás de la feria y jugamos una partida de fútbol americano po
tando de cuidar que mi falda no se subiera tanto. Nos miramos por mucho rato sin decir nada,
alejarme un poco, pero mi compañero seguía acortando el e
si de verdad m
a palabra «cita» haciendo comillas con mis dedos, pero a pesar de eso sus ojos no dejaron
quien se acercara un poco más, hasta que toqué su mejilla con cariño. S
gradecer ―murmuró muy b
agradecer, anoche ya
su toque aún en mi mejilla, se sentía cálido y eso me esta
nte, ¿p
cional, no dejaste que me rindiera nunca y sé que
an sincera solo hablaba bien de él. Sé de lo maltrecho que había quedado su cuerpo después de la lesión tanto física como emocional, recuerdo muy bien que Killiam luchó por vo
nta
útbol y este se notaba en completa calma, éramos solo él y yo en medio de la grama, luego desvié la mirada hac
te, nada más esta locura en la que me
equivoco? ―pregunté sin levantar la
ue lo ha
mantén la promesa de que nadie se va a e
que te traje
un poco la cara, observé cómo se sacaba
necesidad de h
es para sellar
de tu mamá? ―preg
a una de las pocas personas que nos apoyaría en este desmadre que vamos a hacer
e Killiam, pero la Teira celosa y caprichosa solo quería devolver la alianza a
ía más dudas en el chico frente a mí, así que solo estiré mi mano i
promiso falso ―advirtió, leyendo mis pensamientos―. Sino más b
verlo a la cara, por lo que me abalancé encima de su cuerpo para que me recibiera en un abr
dulces palabras de Killiam, quien me
o en la garganta, así que solo me le
el señor Silva a apagar las luces del campo ―d
llevarte tan tarde a casa. Le sonreí un poco ant
ía quedado profunda y solo pude sentir los brazos de mi amigo, que me llevó cargada hasta la entrada de casa de mis padres. Lo
agradable ―escuché a duras
ndo, pero es muy agradable su compañía, s
de verdad el sueño se adueñaba d
ides a mi hija, ell
e soy». Pensé mientras Morfeo me avisab