No me dejes, mi querida mentirosa
ó y sus ojos se suavizaron,
il. "Solo quería... hacer algo para ayudart
todavía parecía dispuesta a abalanzarse sobre ella y destrozarla, mient
a no le parecía tan aburrida y
a familia Brooks, mientras que la otra le recordó
hilar
mientras agregaba: "Pero Stella tiene razón. No sabemos si me atreveré a seducir al siguiente hombre que se cruce en mi camino. Tal vez alg
ocidad con la que apareció. Sin esperar una res
oz estridente de Stella atravesó el aire. "¿Ya viste la clase de per
amabilidad fingida. Entonces, dijo con una voz fría y calculadora: "Ni siquiera pertenece a esta famili
no servían la cena, debido a que el señor Roger Brooks, el padre de Ethan, aún no llegaba. La chica estaba agradecid
una vez vibrante, estéril y desolado; mientras contemplaba las flor
atrás ligeramente, perdida en sus pensamientos. De repente recordó que la situación de Ethan estaba empeorando; e
endo por conveniencia, viéndolo como un medio para alcanzar un objetivo en específico. De
sabor, sin importar cuán fugaz fuera, la había v
s?", la voz de Ethan cortó el silencio en un tono mordaz pero sereno
de la casa se derramaba sobre su figura, brindándole un resplandor etéreo que la hacía par
su pecho a la vez que esbozaba una leve sonrisa. "Entonces, ¿vin
. Ethan odiaba y al mismo tiempo amaba esos ojos; ese brillo travieso la h
cada vez eres
No me disculparé y tampoco tienes que recordarme cuál es mi lugar. No es asunto tuyo si la famili
antó del columpio con un agarre firme y la miró fijamente. "¿Una irrelevante?", repitió él con una
dió y la siguió sujetando con fuerza; la atrajo hacia su regazo mientras toma
poder liberarse. "No olvides que estamos en