Ojala Fueras Tú
seguir ahogándome en un océano de facturas impagas y noches en vela. Gabriel Montenegro no solo era mi salvación financiera, sino tambié
me recogió frente a mi destartalado apartamento. El chofer, un hombr
Montenegro la espe
igo. Apreté el asa de mi bolso, una de las pocas cosas decentes que tenía, y me acomodé e
mbiaba de opinión? ¿Si decidía que yo no era lo suficientemente buena para este plan? Tragué saliva y apreté l
es que parecían diseñados a mano por artistas. Sentí que cada paso q
tido como siempre. Parecía tan fuera de mi alcance que
ndome de pies a cabeza con esos ojos grises
o o una simple observación
as...
más parecía un gesto automát
Tenemos much
a con muebles que probablemente costaban más que todo lo que yo había ganado en mi vida. G
as aceptado el trato, ha
nta estaba seca y mi co
ás a eventos, reuniones familiares y cualquier otra situación que lo requi
fija en él, aunque su intensidad
ten
rá de tu imagen. Necesitas pare
pero sabía que tenía razón. Yo no encajaba en su mundo, y una parte
eta. No puedes hablar de este acuerdo
una ri
a quién
o de lo necesario, como si intentara descif
ntonces, com
intiendo cómo mi es
asi
mis padres. Es la oportunidad perfec
anto con mi p
padres
con eso? -preguntó
que pudiera decir en voz alta. Así
a llegará en una h
dándome la espalda mientras salía de la habitación. Yo me quedé
-
un lienzo en blanco. Mi cabello fue lavado, cortado y peinado en una cascada de ondas suaves que enmarcaban mi rostro.
ante, con detalles que insinuaban sin revelar demasiado. Cuando me
estilista, sonrie
mundo que no era mío. Pero cuando Gabriel entró en la habitación y me v
rada de una manera que me hizo sentir
que su tono era más suave d
-
era aún más intimidante que la de Gabriel, y su familia no t
astar con un simple movimiento. Su padre apenas me dirigió la palabra, y sus hermanos, au
do la conversación inicial y la tensión con la fam
-
ellos como si yo no existiera. Gabriel estaba al final de la mesa, con una copa de vino en la mano, luciendo impecable como siempre. Cuando sus ojos en
no. Su mirada evaluadora me recorrió de pies a cabeza cuando me acerqué a mi asient
me puso los nervios de punta-. Gabriel, cariño, ¿no crees que deberíamos haberle consegu
expuesta, como si todos estuvi
si mi relación se basada en ropa estaría como mis primos -
i va a estar en nuestra familia, debería esforzarse un po
, aunque no tenía p
n hombre joven con la misma mirad
eres así
mpió Gabriel, su voz
el tipo de mujer que aguantarí
bre mayor con un aire dista
e nuestra posición requiere una imagen impecable, y esto.
a comida frente a mí seguía intacta
iel, su tono firme pero neutral-. Y nadie
ndose suavemente-. Sabemos que esto
Claro, esto no era real. Lo sabía desde el principio, pero
.. -intenté hablar,
Sebastián con una sonrisa burlona-. Todos
ntra el plato con un ruido fuer
casa, mi herencia, mis Bines, todos ustedes dependen de mi para sobrevivir, y quien no
razos, claramente molesta por la defensa d
te, volviendo su atención ha
cer. Pero también sabía que, si no hablaba, segui
rendida por la firmeza en mi voz-. Sé que no pertenezc
esperara que yo tuviera el valor de responder. Sebastián sonrió, divertido, m
me miró con algo que
ntó antes de toma
a agotada, también sabía que no iba a dejar que me pisotearan tan fácilmente. Sin embargo, una pregunta p
ión" con una sinceridad que incluso yo creí por un momento. Cada vez que sentía qu
física como emocionalmente. Gabriel me acompañó hasta la puerta de l
te bien e
aunque apenas podía
on mis pensamientos. Me desplomé en la cama, mirando al techo, y me pregunté