Los labios del pecado

ia Lac

or mi ventanal me hace vol

qué ho

stro, cruzo mi brazo por encima de la misma y

maldigo internamente haciendo

r feliz!? - me quejo y rep

nto algo hinchada, estoy segura de qu

ierro mis ojos por la

ficación del Ins

realidad es mi prima pero no

aprovechando mi día de descanso. Me regaño mentalmente y vuelvo a la cama perezosa, ignorando todo a mi alre

sp

asa! A esta hora

a que lleva el diablo a vestirme. Me coloco una falda de tubo negra con una blusa tipo camiseta colo

pequeños salti

do hacerme una cola de caballo alta bien alisada y tomo una cartera a juego con mi atuend

rrido como loca. Le echo una mirada rara a mi celular y me miro en el espejo del ascensor. Estoy

ucho decir y me giro lanzá

cinturón de seguridad. Me doy una mirada rápida en el espejo retrovisor y saco un labial mate pa

a para alisar no qué arruga. Camino hasta la puerta y toco el timbre. Siempre

- me saluda Mar

desde que tengo memoria esta muje

aludo con el mismo afecto que e

n mi

os unos 60. Aunque no se ve mal ya las arrugas se not

e dice y mi sonrisa se quiebra

. Cuando entro todos están en silencio, comiendo

- saludo con u

onde se encuen

i sobrinita? - la molesto ap

se queja - ya soy

malcriada - le doy un beso en la m

padre que se encuentran uno junto al o

ero sentándome en el lu

responde mi madre - la emp

l - lleva bastantes años en esta casa c

e llama la ate

ia. Acabo de llegar y ya me

o, solamente interrumpido por el sonido de lo

lo juzgo, ni le guardo algún tipo de remordimiento, pero lo que le hizo a mi madre, a pesar de su forma de ser, no se hace a nadie, es imperdonable. Mucho menos con una mujer que ni siquiera conocía. Para completar de dicha infidelidad nació un bebé, el niño es hermoso y lo adoro, pero eso no quiere decir que consienta que mi padre se siga viendo con esa mujer, el niño no tiene culpa, además es un niño adorable y cariñoso. La única que lo visita y lo ayuda soy yo, ni mis hermanos ni mi sobrina quie

ro - avisa mi padre y sale

ta de la casa. No creo que pudiera subir las escaleras sin dificultad y pues me da pavor que te

a lágrima silenciosa rueda por mi mejilla y la limpio con cuidado. Lamento tanto ver a mi padre así. Recuerdo cuando era una niña lo fuerte que era y lo grande que

n nuevamente. Mi madre se encuentra sentada j

- interrumpo

o perdido - comenta mi

enemos las mismas cosas. Somos tan i

ia, mi hermana - viajand

como él - comento y s

e tienes que hacer es centrarte en buscar un esp

No es que no me gusten los niños, por ejemplo, adoro a mi hermanito, pero no

dvierto- para

o mal - Necesitas hacer una vida, t

reo que sea e

a Victoria - Virginia jamás viene a esta casa, sie

una vida y estoy feliz con ello ¿

me dice nuevamente mi ma

Queda claro? No quiero hablar más del

a ya tiene un

mi sobrina apenada

con una sonrisa de p

afortunado? - la mir

orada - de verdad no

apar - le digo - ya hablar

padre y me detengo, abro la puerta y echo un ojo dentro de la habitación. Está recostado sobre l

puerta y la voz de mi a

- Buenas, señora Charlotte.

arrugados brazos para mi, recibiéndome en un gr