Resurreccion (la rosa de la muerte)

ueva York.

o llegaba a calentar su alma ni un poco. Los años que le siguieron eran vacíos, oscuros y sangrientos. No había mucho para disfrutar. Se levantó de la cama haciendo a un lado las blancas y suaves sabanas de algodón egipcio, dejando al desnudo su pálido y voluptuoso cuerpo. Se viste con la bata

lencería negra de encaje de Victoria’s Secret, sus jeans azul oscuro ajustados le quedaban pintados al cuerpo haciendo resaltar sus bien torneadas piernas y unos glúteos de envidia. A juego con

asillo y se detuvo frente a una puert

as siete, es ho

y elegantes, clásicos y sumamente costosos. La cocina era más moderna, era como entrar en otra dimensión comparada con el resto de la casa. Al entrar se podía ver el cielo por los grandes ventanales como los de un invernadero. El aroma a pan qu

o es que me moleste tu presencia, pero… no me gusta que vengas a

eque al aire para darle la vuelta en el sartén-. Pero no me molesta.

s lo que t

. Y eso

o con la parte de abajo de su pijama, dejando lucir su muscula

sigas los ejemplos de Zach-le comen

buena in

gún q

tú eres la viv

quisi

¿Cuál es el

fresas y moras par

osotros? -p

ido sanguíneo tipo AB+-dejo dos

eguntó Rose

argaret-. Fue l

poco

egó Zach dándole

aso. En el banco de sangre podría

conseguí del

conseguist

opelló a alg

¿Q

nte. El joven s

s dice

gie me llamó, le di alg

avorito y lo drenaras un poco antes de salvarle la vida ¿cierto

epente-. Eso fue exa

esti

noche en una cal

Nuev

nado con las manos al air

ojos azules y cabello castaño claro, entro en l

ías-dijo e

eón-le devolvió Za

ayuno en la mesa y le beso la cabeza cariñosa

Rose? -preguntó el pequeño metiéndose

Bu

alles, si hubiera asistido a

orque no voy a

ecian y hablan de tu trabajo. No tienen por qué saber que tú eres la artista, después d

de los detalles. Para eso te tengo a

nte. Com

oy satisfec

fueron compradas co

s decepcion

me gustaría que vinieras

ades me consume el tiempo, de

que he escuchado de u

as lentas? -pregunto

no tiene

rmina de desayunar. T

¿puede Zeus

lo

licó Justin hac

r favor-imito

vuelve a escapar

erro tiene la culpa? –dijo

Nos vamos en

he) era como conseguir un estacionamiento en Nueva York; imposible, p

junto con un rottweiler de 60 kg. Ellos dos estaban en la espera del ascensor como niños buenos, pero Rose sabía que en cuanto Justin

me obedece y se va, no iré a buscarlo

ará ¿verdad Zeus? - acaricia el perro e

Rose no mu

o; dibujos florales dorados y rojos, embellecían la enorme caja de acero. Los tres suben en él y en cuanto las puertas se cierran, la

o a la música de ambiente del elevad

ue la quinta

eja levantada mirando al pequeño lige

do. Soy una per

. Estaba orgulloso de él. Era una de las po

sorprendía a los adultos a su alrededor, pero eso era algo que Rose temía en ocasiones, ya que l

idiar con ella. Rose y Zach pensaron que era mejor que tomara clases en casa, pero Justin necesitaba socializar con niños de su edad, así que siguieron buscando en escuelas a maestros que supieran manejar su problema, pero fue en vano. Después de semanas buscando, Zach tuvo la idea de crear una escuela en dond

ba vergüenza hacer, así que solo la miraba por momentos, ojos rápidos dejando al aire la exigencia de h

que te p

o-contestó el pequeñ

ojado contigo. D

uieres celebrar

in. Creo que ya son suficien

porque te pasaron cosas malas

entrometido

ces es

más complic

dijo Justin seriamente-. Yo también perdí a mi madre en mi cumpleaños y

ien es un

desperdiciarla en sufrir a comparación de ti, pero nosotros

inmensamente orgullosa del pequeñ

lo que me ense

Hay que da

se toparon con la maestra Johnson, qui

rita Johnson-dijo

días Just

buen

te Zeus lo

o-. Bien Justin, Margaret será la que

felices de verlo y no pueden esperar a ponerse a jugar. Rose se despide de la señorita Johnson y retoma el camino a casa. R

s vuel

o persiguió por varias cuadras hasta que le perdió el rastro despu

o! -gri

qué g

el perro ¿Verdad? -preg

ienso segui

de te arrast

-dijo fr

haha ¿

o es cosa

scarlo. Ese perro siempre v

e estás

al Park. Puedo verlo desd

ra arreglar el departamento. Ya sa

onvencía Justin ustedes y

Sé que eres vieja, pero es tu día esp

asta dejo caer su celular mientras hablaba con Zach, tanto que todo a su alrededor empezó ir tan lento que lograba captar cada instante de lo que creía era una pesa

a. Se quedó con cara de asombro por un largo rato hasta que logro recobrar la razón por un momento pensando solo en si lo seguí

dadosamente unas cuantas cuadras atrás de vuelta a Harlem,

a broma-dijo al ve

grandes pantallas plasmas, una rocola de estilo antiguo con toda clase de música y la barra con finas botellas en la parte de atrá

o está abierto- dijo Se

n, no l

el dueño del bar, Scott apareciendo de la parte t

n una buena mentira como era de costumbre tanto en

queña fiesta y solo observaba alguno de los

señorita. No encontrara un mejor lug

ve bastant

cio. Pero por favor siéntese e

a.m.? -pr

espondió Scott con disgusto. No quer

taba del otro lado d

¿Qué le gus

damente, así que lo único

Blood

oody Mary para la

ose se quedó pensando en lo estúpida que era toda esa

nto Jason mientras carga

a Patterson-conte

la prometi

quedo completamente flechado por

su liga. Solo mírala. Se nota que e

se marchó de ahí sin decir palabra alguna. La mirada fría de Rose puso nerviosa a Jaso

haya escuchado?

sa mirada te

bella... ¿dónde está? -pregunto Scott

e-conte

fue? -pregunt

ir. No dijo na

ura madre de mis hijos se

-dijo Jason trat

haría una fiesta y

sí que ¡rápido, a trabajar! –Scott volvió a la parte de atrás enérg

enía seguro era que hace mucho tiempo no se sorprendía de esa forma. No cabía la menor duda de que ese joven era idéntico a su William, con la diferencia de que era rubio, pero era igual a él, incluso sus hermosos ojos azules tenían coi

odas esas preguntas como si alguna vez le fuese

ando, hasta que recordó la fiesta "sorpresa" de cumpleaños que le t

una leve sonrisa (como era su costumbre para todo) al e

uijuela británica! -le dijo

diosa cucara

e tan amabl

ientras la besaba en ambas mejillas-. E

lquier otro Margaret

n brillo en sus ojos-. De seguro te paso algo

Rose. No tenía idea d

oger con su sonrisa de seductor y sus abrazos lascivos-

o de madurez como

mo termino enamorándose de ella a pesar de Amanda, una sensual rubia de ojos azules, quien era su esposa y se encontraba a pocos pasos de ellos, aunque no era ningún secreto los sentimientos de Roger hacia Rose

ades Rose-dijo A

nda. No debie

alguien jamás es mo

ampiro de más de

mpió Margaret-. Es hora de la c

de la misma forma que antes de convertirse y el tiempo y las circunstancias simplemente no ayudaban. Además, en ese momento, solo tenía en la mente a aquel joven al que deseaba ver nuevamente. Lo anhelaba tanto qu