El regreso de la esposa no deseada
ne privado, se transmitía en vivo
sonó en la sala. "Un millón a l
s palabras, ya que toda su atención esta
punto de que tuvo que hundir los dientes en s
espuesta, sin detenerse n
tras apretaba más su cintura, obligándole
sí que poco a poco, aflojó la
s, él soltó una risa baja, casi burlona.
gelada y sus mejill
a y fue reemplazada por una abrasadora
eroz a medida que pasaba el tiempo. Sus cuerpos s
Vendido por diez millones! ¡Démosle
ó a Alicia como s
notarlo. Sus movimientos se detuvieron mientras sus ojos entre
tes, por lo que cada detalle de sus conoci
guntó, arrastrando las palabras. Sus labios se curvaron en una sonrisa mali
o, ya que lo último que que
parte de tus servicios?"
r lo bajo, haciendo
vici
s fuerza su cintura y se movió de manera más implacable. Su
ente rezumaba lujuria, y sus respiraciones entrecortadas se vol
echó que el hombre estaba en la d
anzó lentamente hacia la puerta, tan silenciosa como un ratón,
nada pila de billetes de dólares en la silla. Una mirada divertida s
ntamente y se hundió en la silla.
, su asistente, irrumpió en l
el cuero cabelludo del asistente se erizó de incomodidad. "Eh, discúlpeme, se
do todas las precauciones. Pero aun así, u
corriente de humo
. Yo... lo hice
ó mucho l
nues marcas rojas que dec
que lo conocía, nunca lo había visto acostarse con una m
ufría una enfermedad, y que po
res se evaporaron ant
lo devolvió a la realidad. "Quiero que investigues la vida persona
ado tambaleándose a su habit
, la había
n y abstinencia se derrumbaron e
ubrió algo: Ali
matrimonio c
í, estaba
rtó algo en su interior. Sus labios se c
o siempre lo
dó muy clara: Alicia no sabía con quién hab
la primera luz del amanecer se e
mpo había estado fuera. Rechinando los di
borde del colapso, él se negó a soltarla,
ponía que er
ndo en eso, sonó su celular. Era una l
extremo de la línea. Sonaba bastant
y se quitó los zapatos descuidadam
erda! ¡Es tan repugnante! ¡Si no quiere seguir casado, debería armarse de valor
profundo dolor
que lo celebraran. Alicia pensó que él había cambiado, así que se vistió elegantemente. Pero solo se
hua había plan
a subir lentamente las escaleras. "Está
medidas? ¿Cómo piensas hacerlo? Solo dime y estaré ahí ahora mismo.
pequeña y cansada sonrisa, pero su
ntó con curiosidad: "Bueno, cuéntame, ¿quié
presentimiento. "¿No contrataste a e
eciste. Esta mañana me envió un mensaje diciendo que te esper
rar cuando entendió
uando la puerta de su dormito
ducha, con una toalla enrollada alrededor de su cintura, estaba Joshua.
, siseó amena