El chico del apartamento 512
ía planeado. Era raro tener un respiro entre t
o m
espacio con una luz cálida que contrastaba con el suav
paz. Lo había dejado reposar en la mesa, mientras yo me acomodaba en mi sillón favorito
mento, sentí que el mundo entero se habí
diálogos sarcásticos de los personaje
g-d
orarlo. Mi primer instinto fue fingir que no había nadie en casa. Después d
e nuevo. Esta vez más
-doo
afé en la mesa emitía un leve humo que me tentaba a quedarme
vez, el ti
n la mesa, y una parte de mí quería volver corriendo a mi sillón, ignorar la pu
rta. Cuando la abrí, me encontré cara a cara
dejando ver sus brazos bien definidos. Los pantalones oscuros combinaban con sus zapatos de cuero, y
que usa
bien que le quedaban. Le daban un aire serio, casi elegante
dó con voz firme, mientras s
su mano, pero pronto me di cuenta
do un poco como compañía del saludo.
do su mano hacia mí, "tiene tu nombre, te
jé al darme cuenta de lo tonta que había sido al poner mal la direcci
cho por la molestia", dije, tomando la caja de sus manos.
titud era profesional y directa, y aunque no se mostró moles
a vez. Que sea la primera y última vez que pasa esto",
la", respondí, intentando sonar más seg
caja en mis manos. Sentía vergüenza y a
eraban. Pero mientras me acomodaba, no pude
ue haya sido interrumpido? ¿O que haya sido espec
a mesa, más tarde lo revisaría, por ahora, segu
⊱𓇬⊰
...", dije, dejando el vaso de cerveza con un golpe seco sobre l
una ceja mientras tomaba un trago. No era de reírse a carcajadas,
una emoción especial, pero se notaba que es
dejó la caja como si yo hubiera cometido un crimen, y se fue. Yo entiend
o si no acabara de soltar un bombazo. Ella era así, calmada, per
estaba yo, con mi pijama de conejitos y él, con esos lentes que... Dios mío, se veía tan bien. Como si
acio, apoyando e
la misma calma de siem
r más torpe de lo que ya estaba. No sé qué le pasa, pero ¿por qué es tan frío? O sea,
me m
pan por ser agradables", dio otro trago,
un robot! A mí me daría algo si tuviera que ser tan... no sé, tan cerrado. Ni siquiera cuando me
zó una
que te dieran e
do que la frustr
que estaba esperando este pedido hoy, me agarró por sorpresa. Pero en lugar de hacer de est
ndo más, pensativa, ant
uizá tenía prisa o no le im
veza y me eché un trag
Porque me dejó ahí, de pie, pensando, ¿en serio? ¿Eso fue todo? Al menos podr
e observó con una ligera sonrisa en lo
ti tampoco te mata que sea se
l vaso de cerveza en la mesa y
vamos, ¡podría poner
el vaso
s que no hacen
tando mi vaso
que nunca salen como esperamos"
un rato, un silencio cómodo que
zo una pausa breve, como siempr
h?", el tono que usó fue más bien como un i
dicho. "¿Te puedes imaginar? Yo ahí, toda despeinada, y él... con esa camisa ajustada, pantalones perfectamente planchados y esos lentes que
impasible, pero me conocía lo suficiente com
casi con indiferencia, pero noté el
me de hombros. "Él estaba ahí, en la puerta, con esos lentes, y yo
otro trago de su ce
cuando estaba pensando en algo. Finalmente, volvió a hablar. "¿Y
Se fue, y yo, ahí, con mi pijama y mi cara de, por favor, no mires
os, esa típica sonrisa que solo ella sabía poner cuando
as
usto lo que necesitaba. Levanté mi vaso de cerveza y ella
⊱𓇬⊰
ha, tratando de ayudarme a ponerme
e mientras intentaba levantarme de la silla. "¡No... no
ba del brazo. Yo solo podía ver su cara volviéndose borrosa y luego enfocada, b
tió, pero su voz sonaba como si vinie
lla, una pierna en el aire, la otra doblada de una forma que ni sabía que era posibl
s ojos, pero en lugar de regañarme, me sujetó
r qué quieres solo una? ¡Toma las dos, llévatelas, están gratis hoy!" Me reí otra vez, sintiendo
no podía parar de reír. ¡Era todo tan gracioso!
i lo que estás diciendo. Vamos a casa antes de que esto empeore", me r
.. solo... ¡enferma de... burbujasss! ¡Son burbujas en el cerebro!", Me
en tu cerebro, solo tienes demasiada cerveza en el cuerpo. Vamos a salir d
en silencio por un moment
a tan arrastrada que incluso a mí me sonaron mal. Samantha me lanzó una mirada tan seria que me hizo ce
o seguía tropezando con mis propio
yo me dejé llevar como si fuera un saco de patat
como si estuviera brindando. "¡Un
y me siguió arrastrando hacia la salida del bar. Yo intenté endere
i... mi... mi cosa!", No tenía ni idea de qué cosa estaba
ese tono paciente pero irritado. "Lo
orque en mi cabeza
endía ser serio, pero salió todo torcido. "¿Sabías? ¿Sabías que las
a vi mordiéndose el labio mient
jas. Ahora, por favor, camina", me pidió
os pies, pero parecía que estaba nadando en tie
e mantener su compostura. Pero era inútil, yo seguía moviéndome como si
te levantas ahora, nos qu
dos me miraban con desaprobación. Al final logré ponerme de p
dole al taxista que le subiera a la radio o que cambiará el color de los asientos para que se vier
", dijo Sam cuand
s separaban del segundo piso. Unos escalones que, en mi estado, parecían mult
zcla de resignación y exasperación. Yo, sin entender mu
de cuenta regresiva para el lanzamiento de un co
nada. Me agarró por el b
cho entusiasmo, demasiado tal ve
chaqueta justo a tiempo. "No vamos ni por
lo hacen los... los humanos normales?" Intenté dar otro paso, pero mis pies decidieron que era m
e delante del otro", dijo Sam, esforzándose
.. y luego el otro! ¡Fácil!" Intenté seguir sus instrucciones, pero en lugar de subir ot
erte antes de qu
ro hacia adelante", Sam me corrigió con paciencia. Yo a
estaba más bien colgada de ella como un koala. En algún p
ntener el equilibrio en el cuarto escalón. "
entras tiraba de mí hacia el
. "Subessss uno y te caes... y... te vuelves a levantar... y
nerlo para no hacerme perder el e
contigo, Elianne. Ahora, sigu
do de nuevo, pero esta vez Sam me sujetó tan rápido que no
a estar empezando a sudar por el esfuerzo de car
eron que era un buen momento para dejar de funcionar.
dije, levantando las manos como si
", me ordenó Sam, pero sin mucho éxito, ya que y
s... una tradición! ¡Tienes que hacer
m, incrédula. "Aprecio más la idea
ándome un poco más sobre el escalón. "O
l brazo, tirando de
Solo faltan unos pocos es
mi parte, conseguimos subir otros tre
tando una mano. "¡Estoy... casi en la cimaaaa
ez, pero no me de
uando lleguemos, ¿vale?
s al último escalón. Yo lo celebré levantando ambos br
"¡Dieciocho escalerass
eza con una sonrisa y m
por favor, entra antes de que te
o... la viiiida!", empecé
Ahora
bía caído en coma tras que me lancé a la cama, Dios, había
rmida. Me encogí de hombros, verla ahí no era nada raro, me levanté sin hacer ruido. Mis pies se movían como si tuv
mi cerebro pudiera procesarlo.
g-d
é, pero mi cuerpo seguía su propio plan,
reció Derek, con los ojos entrecerrados y el cabello revuelto, claramente sacado de un sueño profundo. Ll
iquiera preguntar qué estaba pasando, me puse de puntillas,
toq
so rá
s un