Un amor prohibido con el CEO
ti
te de Nicolás, volver a verlo, hizo que t
ón, por el contrario lo odio con todo mi corazón, lo odio más que nada en este mundo, pensa
imide, quiere guerra, pues guerra
stante transparente, quiero hacerle ver
la cocina, sé que él está ahí, aunque trate
saco de sus casillas con tan solo lla
recuerdo muy bien que usted no es mi madre, y que por su culpa ella está
que tú necesitas -dije llevando mis manos a su dorso de
perdonar el mal rato que me hizo pasar el dí
-dijo tan cerca de mí que sentí mi cuerpo estremecer, dios, si tan solo supiera lo que é
cardía, dije que me vengaría de él, y es l
ás puedo ser tu hermana mayor -dije retrocediendo un poco o de lo cont
d que mi padre se divorció de mi madre? -vociferó Nicolás acercándose rápidamente a mi, su boca se movía al compás del viento, era como si un
mente loca, así que como puedes ver yo no tengo la culpa de absolutamente nada, cosa que no puedo decir de ti -d
hubiera regresado yo estuviera feliz con Mark, disfrutando de la
dose más a mi, sus manos se resbalaron por m
» Es mejor antes que no haya reversa, se que él lo hace solo por b
rse cuenta que su dulce y adorado hijo está colando sus manos en su linda y amada esposa -vocifer
tú ni siquiera te atreves a decirle nada, vaya que eres una basura. -Las palabras de Nicolás me golpearon el corazón, pero aún así no puedo de
e giré y quise caminar, las manos de Nicolás se enredaron en mis brazos hac
para seguir aquí después de darte cuenta de quién soy, pero que vas a saber tú de ve
me odia tanto, o más d
se oscurecieron y se llenaron de irá, grave error, no debí dec
lamarme hijo -dijo tan cerca que podí
que esta vez sus besos no fueron iguales a los que reco
as, mientras mi pecho subía y bajaba solo por él, por mi querido hijastro, debo estar loca,