Imperio Bratva
que aquella preciosa chica no se le comparaba, jamás lo haría. ¿Y qué hacía pensando en banalidades en ese preciso momen
no cuando podían ser descubiertos por ello, la calidez en su palma fue inmediata, como una corriente que le atrave
y acto seguido unos estruendosos pasos
o suficiente, dejándola ahí, y sintió la ausencia de calidez y paz, giró levemente su cabeza para enfrentarlo, pero lo único que pudo v
de solo pensar que podía perderla, su pecho se oprimía con dolor, uno tan agonizante. Dio pasos lentos, mientras intentaba no ser escuchada, aunque viéndolo bien, el tipo ni s
orderse el labio para no soltar
ás bien afianzó su agarre en aquella pequeña
én se cree usted para llamarm
estaba molestando, por alguna razón verla con el
lo conozco. - ladeó su cabeza y le regaló
como él no se v
no cuenta? - negó. - ¿Qué de
conseguir a mi mejor amiga, la perdí de vi
- levantó sus cejas con sorpresa.
de fondo de pantalla y el hombre solo tec
muestra la información en su móvil y Fabiola debe retroceder. -
mejillas se ruborizar
e, para una hermos
e dijeron por el auricular e
gel, ya es
¡Puede ser uno de esos locos con pistola! - y el mayor j
le, de que tenga pistola, lo puedo poner en
uellos ojos tan curiosos todo a su paso y se sintió tan alarmada al momento de salir; las penumbras los recibieron, junto con un fuerte olor a sangre, Fab
a sensible que acaba de tener la peor experiencia de su vida, j
z rechinó con fuerza y unos
e su agarre y corrió en busca de su amiga. - ¡Es
ambas lloraban sintiéndose ta
jóvenes. - Muchas gracias por ayudar a mis
porque justo en ese momento un plan malé
con tanta cautela.
queño ósculo fue dejando en el dorso de esta, haciéndola ruboriza
quiere algo lo obtiene, porque Luka Rizzuto Mikhailov siempre logra y consigue todo lo que se pr
der y sería muy imbécil al no tom
viste, así que busca todo lo relacionado con ella, quién es, familiares,
importaba, después de todo, las reglas no importan cuando eras el maldito jefe; suspiró resignado, no dejando que esos
Luka, estaba sucumbiendo ante esos deseos que él mismo se prohibió, no se lo tenía permitido, pero aquí está, con una maldita sonrisa en sus labios recordando e
verberando varios recuerdos y aunque el ahínco tal vez no lo deje pensar d
este su p
..
sus bonitos ojos, vaya día tan alentador para ella. Comenzando por perderse la primera clase y luego terminando en que se perdió ese estúpido examen, y ni siquiera quiere re
que la llevaron a la ruina, así que se permite sollozar en voz alta, se permite sentir mucho más de lo que hace siempre, y justo en ese momento lo recuerda.
go...
unció tan lentamente.
orriera su cuerpo y un atisbo de calma la albergó; su piel reluciente, tan blanquecina, tanta suavidad, las gotas ca
luso viendo su realidad, pero, ¿importaba acaso? El mundo
tos, mientras salía de la ducha, pensó en su voz diciendo su nombre
terior y luego su pijama. - Me estoy volvie
s loco que justo ahora tenía en su poder toda
acarrean conse