Imperio Bratva
tas y vacías que ni siquiera logran darse cuenta de su proceder. El mal camina entre ellos y su basto
ser admirada. Sus ojos siendo tan malévolos, y sus
espaldas. - ¿Debo arrodil
n maligno ha
giró, aquel sujeto definitivam
y yo seré el encargado de joderte la vi
propias palabras pueden ser t
ios, dejó a ese estúpido allí sin más, pero por sup
se inmuta, ¿por qué habría de hacerlo? Después de todo, es el jodido rey d
hacen entrega de su ropa. - Un
lento, se escabulle entre las personas, porque mientras él deja ese jodido lugar, hay alguien suplantándolo en la entrada principal. Luka no estaba hoy para sopor
o asiente, saca la portátil de su estuche y comienza a teclear al
án avisados. - simplemente asintió. - Tienes una reunión con el primer minist
ey nuevamente
código en su teléfono y luego se lo mostró. - Ves esto, quiero, no, necesito esta mierda en mis manos, así que haremos una
ina, tan desacat
te melancolía, Luka no lo sabía, pero ni siquiera estaba dispuesto a descubrirlo. Nadie tuvo compasión de él en el pasa
n a su lado, asiente de
piedad, donde un montón de ratas trabajan par
te está
, y sabía que solo podía conseguirlo de Luka, pero vaya, que tan equivocado
sor para así poder subir, necesita terminar con esta mierda. Las puertas se abren y él ingresa junto a Maxim, presiona el botón del último piso y las puertas nuevamente se
en busca de Dominic, quien para su suerte los espera
cer y que grato es tenerlo aquí con nosotros. - rueda
ermiso e ingresa a la oficina, la cual es decorada por una larga mesa de reu
..
en fuera del salón esta vez. - la menor solo se ríe de
e preocupes, aún q
bían tomado el camino hacia la universidad, y que pérdida de ti
ando tu Nani? ¡No que debíamos i
e, creo que por eso me he desviado, pe
ada de autobuses, lo necesari
vocado yo, deja que solo hagam
vale, M
eta que ahora se aparcaba a sus espaldas, y quizá si Fabiola hubiese previsto lo que sucedía a su alrededor, todo habría sido tan diferente; pero ninguna se di
n se mantuvo petrificada en su lugar sintiendo el miedo calar sus huesos con fuerza, mientras notaba como su amiga la
r cada uno de sus se
prisa que ni tiempo
reaccionó, notó la sangre en el suelo y l
lo fuese efímero, quería que acab
, intento buscarla a su alr
o, un montón de personas
tirlo, la venían siguiendo, los pasos en la lejanía la alertaron, debí
nía señal, maldijo en voz baja, no había solución y al pare
enzaron a caer de sus preciosos ojos, subió las e
miedo de encender la linterna y alertar a
y que tenía examen
an a disparar, no había duda de eso, lo pudo escuchar, justo en ese momento jalaron del gatillo, ella cerró sus ojos con fuerza, sollozó en silencio y
a v sleduyushchi
la próxima ve
en su cuello, lo podía sentir tan cerca de su cuerpo,
ero estaba siendo casi imposible por toda la situación
uerta y no quería ni imaginar el infierno que estaban viviendo los que aún permanecían allí... Nani.
se permitió llor