El universo que inventamos.

untos que ni por un segundo se fija en las demás chicas hermosas de la clase, pero esto me lleva a pensar que tal vez es por la s

reté desde el primer día que entró a la biblioteca y caminó hacia mí para pedirme ayuda; simplemente,

guntarle cosas o simplemente a pedirle algo prestado;

rodearlo con mis brazos y piernas

es

Tal vez por eso las trata con simplicidad y desinterés; sin embargo, eso no impide que sienta unos celos

da más que observar cómo esas tratan de llamar su atención y disfrutan al men

◔◡

407; es el único número del aula que ha permanecido

uerta y yo le correspondo con una sonrisa antes de dirigirme a mi lugar.

hasta que el profesor Jack dice a

patía, que se considera un valor importante, pero no es el único que veremos en esta clase. -Su sonrisa pícara me hace dudar de que lo sigui

ción nunc

deben presentar la exposición

a desarrollar el trabajo y la mía se convierte en un poema cuando de

s, pero mi sorpresa se hace más grande al escucha

am

rcajearme o irme corr

que me tiene como pendeja y decidí ignorar porque tiene no

el amor, e

omento en el que hago un mohín, y tengo que cruzar mis brazos sobre el escri

que quedan antes de que suene el timbre para el receso, pero yo permanezco en esa misma posición todo ese ra

vanto para recoger mis cosas, mient

alir, sino para acercarse a mí. A pesar de que me concentro en no mirarlo y

ahora para empe

e hacer y que cada uno podría hacer su parte por separado, p

de esconder mi gozo por su propuesta-. Hay qu

r impenetrable-. ¿Conoce algún lug

ente el despacho abandonado-. Aunque, primero acompáñame a

e no tengo

s dentro y camino adelante mientras él me si

mis espaldas, sus ojos se abren como platillos por la sorpresa, pero actúo rápidamente el

uda sonriendo más

beso en la mejilla-. Tengo que empezar un trabajo con

as -saluda

su sonrisa se esfuma inmediatamente al ver la serieda

la seguida de Alex, que permanece en silenci

ue no sé si para hacer el trabajo o simplemente para esta

◔◡

os y él entra

erta cerrándose, mi pulso se aceler

rdo que corra hacia él y lo bese, que le pida que me desnude aquí mismo y me haga el amor como en mis sueños; sin embargo, como una buena rebelde, no le hago caso a ninguno

. Saco mi celular para empezar a investigar sobre el amor y ensegui

pregunta rompiendo bruscamente

, y dejo enseguida lo que estoy

lo que siento cada vez que lo veo aparecer en mis sueños, y lo que estoy sintiendo just

to e inclinación hacia una persona o co

pe-. Ellos son los que ponen su definición científica en i

aba de

egundos mientras nos miramo

musito levantándome del sofá-

tamente limpia -a

mí no

cuclillas frente a la pequeña puerta del

de sus pasos sé que se acerca-. ¿Acaso esa es una

que necesito

toy tratando de calmar los latidos de mi corazón presionando la man

-pregunta, notándose algo tenso-. Es

arajo,

la pequeña abertura del escondite donde me encuentro y en cuestión de