Secretaria del Sexo
l
gunta Carolina entra
ue jeans negro rotos muy ajustado, pero lo que no encuentro es una camisa que le f
llé desinteres
blanco. Sé a dónde quiere llegar, así que suelto un bufido
y la ignoro-. ¡No duras ni un mes en aquellos
que no sepas que he conseguido un trabajo
mí aquí. Únicamente sólo te veo en las mañanas y unas que otras veces en las tardes. No quedas conmigo a cenar como antes,
i caso me hace, entonces, ¿qué caso tiene? Busqué otro empleo diferente por hacer algo bien y ayudarla con los gastos del apartamento, ah pero,¿qué sucede? Que ella se va de noche -y ni llega a la casa-, a casa del maldito novio abusador y ni mensaje deja.
ación, pero si sé que seguramente se encontraba de ida a la casa de su novio. Aquello último me enfermaba, que ella estuviera con una persona así, pero supongo que e
r tan dura con
mi ayuda y no lo no
o hubiera dicho. Mi teléfono suena con una llamad
ol.
hí?! -reí al escuchar la
llegar-contesté-. Te aviso a penas salga, ¿s
e ello, otras caminan lentísimo cómo si estuvieran pidiéndoles permiso a sus pies, unas cuantas parejas que se ven enamoradas riendo tomados de sus manos, y y
dor. La nota que traía en manos decía piso 14. Marqué el número y esperé a llegar, los minutos se hicieron sumamente lentos hasta que por fin abrió y me vi siendo arrollada por muc
o de entrevista con
cho. Debo admitir que soy sumamente guapa, con un cuerpo de infarto natural y algunas partes salieron del hecho que me metí en un gimnasio. Tengo un culo redondo grande
no me ganaba ni un poco. ¿Pero q
a, justo al frente-no s
nico color que había en esta Oficina era un porta retratos azul chillón que descansaba en la mesa dónde Conner reposaba sus brazos. Noté como miraba disimuladamente mi cuerpo, y sonreí -de
s que los sentía
ó y lo hice gustosa-. Iré direct
o a mis demás jefes y dos me daba otro punto de favor a mí. También por un lado no era tan mala, hacia el trabajo q
labios de nuevo-. ¿Cuándo com
su espalda en la silla giratoria, y me lanzó una mirada que contení
ismo-su voz se esc
eó furioso-. Pe
uito, sólo un poquito diferente con el hecho de que no lo quería para meses, sino
on fuego,
em