Seren
lvidara de mí existencia, estaba aterrada... mi madre y hermanos no e
el menor ruido posible, rogando a que no me vea. Pero no funciono sentí
a y se lo demostraba cada que podía. En cuanto lo que me hacia a mi nunca lo supo o eso quiero creer yo. Hay veces que quiero decirle lo
tro hasta cansarse yo no paraba de llorar, ya no quería que sigui
e un momento a otro con un movimiento Brusco logre zafarme de su pesado cuerpo y lo primero que atine a hacer fue correr hasta la puerta. Iba tan rápido que no me di cuenta que estaba en medio de