Doctor Gonzalo Daver
rté más
irviendo mi desayuno, no me gustab
do estaba allí, el personal sabí
mañana bast
mi oficina, estaba realmente atrapa
do mi celular, para qu
e paciente, estaba calculado las posi
de mi despacho, estoy por echar a
porque lo hice, entra Tere
pe doct
se lo permito porque lo hace con mucho respe
é su
ta, la operaron de la vesícula, está c
perando yo, también su operación
coincidencia
ue operé, era el mismo qu
, mientras le indico q
ión, si es ella, debe tener alguna infección, cuando le estaban pasan
lguién puede ser algo ocasional, cuando es al revés, solo se pie
tración de la mansión y se reúne to
entre
s del personal de servicio, nunca había estado en
un pequeño sillón, un escritorio, pequeño, en el que había una com
e casi muere en manos
e ella sería el segundo miembro de su fa
perder pacientes, estoy preparado para hacerlo, claro que lo de
desva
emperatura
y a re
ción, dándome el lugar p
aqué la parte de arriba del pijama que tení
quería corroborar en donde estaba la in
ba de la ingle, o mejor dicho, apenas abajo de
nfección se produjo en la qu
infeliz que se estaba t
ré el
smo, al pensar en l
de ser profesional, pero en ese momento, me e
e me produjo verl
bastante potente, quería cortar la i
ortar una infección, pero antes te tengo
ner que tomarla en mis brazos para ayudarla a sentarse, d
torio
era im
estaba en el límite, aunque sus valores pueden llamarse
rse, lo hice con
vestirse y vestir
térmico, tamb
prometido con su salud, por dos motivos, uno es a causa de los cirujano
e suponía que dentro de las próximas 1
ía que mejorar inmediatamente, claro que como la infección seguirí
nquilo que cuando en
abía mirado, como hombre, a una pac
ese enfermero que s
eresa y la
l, para que se lo su
pase por acá,
cito, tuve mucho miedo
a operación, no se preocupe, es controlable y
a, la que tenía de
ntrar en el caso qu
r en esa chica,
ntro de cada una de las clínicas de
s humanos, unos tras otro y con la
yó en la salud de la chica
eía al día siguiente a primera hora, quería saber c
dadoso al contratar al personal méd
amento, no el que conoce Ruth, lo hic
iera en la cama, sin embargo, algo me seguía mol
on el jefe de cirugía, que
nal mediocre en la clínica, que dependía
able, pero no había lu
e seguía
os que ese equipo médico había ate
temas de los que se tendría que ocupar la gente qu
Ruth, quedé en verla a última hora,
ella, po
siedad, llegu
lud de la joven y la responsab
ia ya me estaba si
unté a Maria por Teresa, quien se p
iba a revisar y que le iba a aplicar nu
hasta la puerta de la
a puerta y abri
l paso y
e Teresa, tenía un mejor semblante y estaba incorpo
izó cuan
, lamento que tenga
amente y con
son
idea que casi se muere en
arte una inyección que contiene antibiótico, e
ngo buena ci
in sostenerm
ime rev
mis ojos siguen sus manos y me asombro al ve
el aco
as el pantal
n el borde
como efectivamente, la he
a, así te reviso la herid
a ser un colo
o se la levantó, pero realmente era incóm
la, por
porque le debía mo
ro comentari
té de ignorar su timide