EL LIBRO DE LAYKOS - la otra historia del hombre lobo
a para que la maldición no afectara a los hombres buenos a los ojos de Dios. Metatrón, habiendo sido autorizado por Dios para actuar en secreto, también facultó a Hound y a su desc
d. Al igual que mi padre, el Creador, siempre he creído en el hombre, en su potencial y en su bondad, incluso para mis hermanos de luz esto no es más que ingenuidad. Esto se debe a que para mí, es más que eso: ¡es fe! Por eso, nada se crea y nada se destruye antes del Creador: todo se transforma. Y por eso no solo te otorgo poderes, sino también una profunda transformación en tu vida, para redimirte no solo con la descendencia de tu padre Noé, sino también para en
n en enemigos naturales de los vampiros, y así surgieron los hombres lobo. A los ojos del Creador, cuya omnisciencia ya conocía el resultado de la actitud de su hijo Metatrón, desde ahora y para siempre, esta descendencia de Dog adquirió una misión destacada aquí en la Tierra, que era mantener el orden en este submundo emergente. Esto se debe a que tanto ellos como los vampiros podrían infiltrarse e
ros, que a lo largo de su historia llevan su marca, caminan a la sombra de la humanidad, bebiendo la sangre de animales y hombres, evitando revelarse para no ser cazados y asesinados. Y cuand
muerte. Estos seres se convirtieron en los zombis que conocemos hoy en día. Los humanos que buscaron controlar vampiros, zombis e incluso los demonios del infierno mediante
Pero esta nueva humanidad no se justifica por nuestro conocimiento limitado. Podemos deducir, entonces, que tú
sedientas de mal. Pero Metatrón incluso comprende, porque siendo el ser humano un animal racional con libre albedrío, uno de sus instintos irracionales más comunes es el egoísmo. Es por eso que él y todos los poderes celestiales
ién estaba cansado de ver a los hombres matarse entre sí y ofrecer los cadáveres como sacrificio a dioses fruto de su imaginación que tomaban forma a través del barro, la escritura o las tintas. Metatrón estaba bastante preocup
estas conclusiones amargas y tristes: si el Creador se cansa de la humanidad, pronto se cansará del Universo, del mundo y de la Tierra misma, hasta que se canse de estar harto. Cuando eso suceda, existirá nuevamente en la oscuridad del vacío, solo coherencia e incoherencia; conciencia e inc