Castigando a mi jefe

e dije mientras

mando. Desde ahí nos dirigimos a un salón, mi rostro estaba bellísimo, con solo algunos pocos euros, de los miles que le costaría a Theo su humillación. En el salón me

iana, Theo tendría competencia, estás h

o así me lo diría, era tan directa y honesta que parecía carecer de hu

, el cuidado estético era demasiado importan

es Theo? —preguntó

ué angustiada y mi

s la versión femenina del

lo peor de los tres para crear la mujer perfecta para Theo, después de salir del centro óptico fuimos a remodelar el closet, aunque Gianni se negó compré para

de Gianni, quien empezó a buscar entre las muc

eo me había delegado, mientras me ponía el labial dejé pasar la sexta llamada que recibía de él. Los cumplidos de Gianni sin duda me hacían sentir much

acomodaba la blusa que usaba, para

suficiente efectivo de aquella tarjeta, el ahor

e dije que había olvidado el móvil mientras cumplía con mi tarea, me informó cuando regresaba y la tranquilidad con la que me hablaba se sent

ina en la que me poseía, mientras lo escuchaba sentía mucha rabia, mientras Justin era detall

ate en el presente y futuro»—dijo la

la empresa, has bien tu traba

a, llegamos a la empresa y la gente le preguntaba a Gianni quien era la mujer a su lado, lo que indicaba que el plan

Justin —quiero decir mucho más que antes, claro, porq

ño y acarici

ipática y poniendo en pr

era hecho en otro momento, ante su cumplido se sentía de maravilla. Esa tarde, entre reuniones y organizar agenda

eso me ayudó a controlar los nervios y ansiedad, había estado hablando con Theo

estábamos por ver una película de Netflix y llamó Theo, para decir que

o y tú llegas cuando yo te avise. —

s y nos preparamos para dormir, ella se había dormido, a mí me costaba hacer

llamada, te dejé listo el atuendo que usarás hoy

scando, siempre solía llegar antes que él, ignoré la llamada a la espera de que Gianni me avisara. Esperé y justo cuando estaba por llamarla llegó un mensaje, decía que era hora,

eo algo alterado. —¿quién es esta belleza de dama,

ber que era bella, "mi espalda".

emorado. En un minuto estoy en la ofi