ESCLAVA DEL MAFIOSO
2: La l
muy muy auténtica la cual a pesar de tener todos esas características no tenía una estable posición social, desde pequeña habí
iez años
s eran azules de diferentes tonos junto a morados y amarillos y allí se encontraba Charlotte cómo todas las mañanas alistándose para irse a la secundaria, huyendo de su habitación pues necesitaba por algunos segundos
día, cómo era usual su padre siempre la llevaba a ella a su escuela para el dirigirse así
inte minutos para entrar a su colegio, está de manera rápida comenzó a
cuchar a sus padres discutiendo en voz baja, algo que
ste lugar no viviremos para contarlo, la única opción que hay es entregarme a ellos, pues si no tenemos el dinero eso es lo qu
hasta Estados Unidos, está es la mejor manera de que más nunca nos encuentren. – resp
seria mientras tomaba las manos de su esposa y la quitaba de su espalda – Tú, no le comentes nada a nuestra niña,
a sus padres llorar abrazados, pues reaente no había podido escuchar toda la conversación de e
encontraba llorando, al ver esto las l
on mucha pena y tristeza mientras caminaba hasta donde es
a la muñeca de su hija y así comenzaba a caminar hasta la puerta de su casa – ¡Fué una discusión muy tonta la que tuvimos pero creeme que no volverá a su
lo hacían? Se preguntaba una y otra vez, ya para ella esto era una
ría y felicidad. – Dijo este hombre de manera suave y sutil mientras miraba a su hija y caminaba – Quiero eliminar por completo todo tipo
– Dijo Charlotte mirando de manera delicada a su pa
igue tu sola al colegio. – Dijo este hombre con un tono algo más
suave y dulce mientras miraba a su
rer, saltar y jugar con su padre le saco una hermosa sonrisa que tanto necesita a en ese día que parecía ser muy genial, está no
menzaron a tomar nuevamente su rumbo esté comenzó a caminar junto a su hija hasta la secu
or favor prométeme eso! – Dijo con un tono de voz algo e
ento? – Pregunto algo ansiosa Charlotte con un tono de voz calmad
o hagas no quiero obligarte a hacer algo que no
starás allí guardado por siempre y para siempre, pues eres el mejor de todos los padres ¡Del mundo mundial! –
ertemente mientras de sus ojos salían una que otras lágrimas las cual no podía contener, luego de eso con su mano
o más tarde que nunca y te van a regañar! – Dijo aquel hombre e
! – dijo Charlotte mientras se acercaba hasta donde se encontraba
o que realmente estaba sucediendo se dió media v
planeaba hacer, no sabía si ejecutarlo o no, dejar su hija la cual era lo único que le daba felicidad lo ponía muy triste y realmente no deseaba dejarla, pero n
és, ya casi llegaba
nuevamente a su padre Gerardo Rizzo y llegar a su casa
a y abajo rápidamente, hasta que comenzó a sonar el timbre está al escuchar el timbre de su colegió la
irigió hasta la entrada de la secundaria en dónde usualmente siempre la esperaba su padre pues este salía algo má
a no le parecía lógico y comenzó a buscar a Gerardo mirando hacia todos lados, de manera lenta mientras todos los
nutos d
pero ella no veía ni cerca al suyo, las ilusiones de esta se fueron poco a
nutos d
iste, está tenía un mal presentimiento y mientras miraba la pu
y bajo mientras sus ojos se llenaban de lsgrismas, pues se encontraba ella sola en la secundaria al verse sola est
u representante, así que no la podemos dejar salir.
le dió la espalda rápidamente salio corriendo de las instalaciones de su secundaria,
no apareciera en la secundaria cuando el era el hombre más responsable de todo el mundo, el más amoroso
gritaba algo agitado mientras corría tras la niña, pero
dónde se acostó en una banqueta y comenzó a mirar el cielo, el cual se encontraba lleno de nubes
a ti, ni a mi hija amada, pre
ar a la secundaria? ¿Qué está sucediendo? – Se preguntaba Charlotte m
, preguntas que no podía callar y come