Capitulo 1: Abbondanza
Robert Greco es un hombre de altura normal, ni tan alto ni tan bajo aproximadamente de unos 1.70 metro, apuesto, de cabello negro y ojos verdes los cuales al mirarlos fijamente te envolvían y te hacían querer ver más y saber más sobre él, su cuerpo era otra de sus cualidades geniales, pues está tenía un cuerpo envidiable para cualquier hombre, unos grandes pectorales y brazos además de un abdomen marcado y unas gigantescas y fuertes piernas otra de sus características era su sonrisa perfecta.
Robert frente a sus amigos más cercanos, sus familiares y además sus trabajadores era un hombre común y corriente al cual llamaban por su nombre pero para sus aliados y sicarios el nombre que utilizaban para llamarlo entre mafiosos y entre la policía era como "Boss" pues el gran y mencionado Boss tenía una doble vida, nunca nadie le había visto el rostro a este hombre pues siempre que hacía sus robos lo hacía de manera anónima o marcando su apodo "Boss"
Este se la pasaba todas las noches en un bar de los más prestigiosos de el país Italia y la ciudad de Roma llamado Abbondanza del cual Robert era dueño buscando grandes e importantes mujeres casadas para así enamorarlas, prometerles el cielo y las estrellas, luego cogerselas para así seguidamente sacarles información sobre las empresas de sus esposos y luego de tener de ellas la información que deseaba botarlas sin interesarle nada.
Este era un día común y corriente en dónde se encontraba Robert sentado en uno de los muebles de la zona VIP de Abbondanza, cómo era común se encontraba viendo a las strippers cómo movían su grande y curvilíneo culo y cuerpo frente al tubo.
— ¡Mesero dos tragos de Tequila por favor, de la manera más rápida posible! – Dijo Robert con un tono de voz alto y claro mientras subía su mano para que esté se diera de cuenta de quién se trataba.
Luego de eso coloco su mano en el espaldar del sofá en el que se encontraba y con una sonrisa muy picara miro hacia su lado derecho para así comenzar a dirigirse de manera coqueta a la chica a su lado.
— ¡Mucho gusto hermosa, te mandé a llamar pues al llegar aquí no pude dejarte de mirar, tu cuerpo, tu cara pero sobre todo tú cabello largo y negro llamo completamente mi atención! ¿Qué haces por estos lares? Y además ¿Cómo te llamas? – dijo Robert de manera dulce y romántica mientras miraba con mucha pasión a la chica a su lado – Disculpa hacerte tantas preguntas, pero es que en realidad me gustas demasiado.
— Gracias por decirme todas esas lindas cosas, mucho gusto mi nombre es Diana Rizzo y vine a tomarme unas copas, pues la verdad estoy celebrando que la empresa de mi esposo ha obtenido muchos inversionistas últimamente y ¿Que mejor forma que venir hasta Abbondanza a disfrutar la noche? Me han comentado muchas buenas cosas de este lugar. – Dijo está mujer mientras le extendía su mano a Robert de manera coqueta, además una sonrisa muy llamativa y pícara se asomaba en su cara.
Robert al escuchar lo que está le acababa de decir una sonrisa pícara y malvada se asomó lentamente en su rostro al parecer este había encontrado otra vil víctima para su récord de mujeres engañadas y engatuzadas por su rostro hermoso y perfecto además de su cuerpo envidiable.