El Arte del Sexo

la ciudad des

esado par

o esa, ya llevaba más de un año haciéndose cargo de esa compañía como par

pentino? -el jov

bo a Chicago sus intenciones no eran las de quedarse permanentemente, pe

treves del crista

rte explicacione

pero si vuelves, ¿Q

aré sabe

la idea de tener a su padre en la empresa, pero confiaba en q

ad por mucho rato. Solo era cuestión de tiempo para que le saliera con una p

ente, prácticamente su crecimiento fue al lado de su madre, pero cuando est

le enseño todo lo que sabía. A decir verdad no se quejaba, fueron los mejores años de su vida, pasar

ualquier momento se volvería a ir. Lo de él era viajar cada cierto tiempo a

oficina que esta al fond

parece

s? -Connor espera p

mandado hacer se

S

de la oficina. El CEO permanece de espaldas

señor Gershon, ¿necesita

e se despedía antes de largarse, y no podía irse si

loj fijándose que la joven anunciaba su

-responde el chico tranquilamente a

ele dándose la vuelta, el CEO se gana

lida -objeta el h

ta antes de que se vaya, solo le

vez las piernas de Daviana se volvían de gela

ntenta objetar de nuevo,

a regalarme 5 minut

trol de sus acciones ella niega, era como si

a con la mano -. No le molesta

proxima al escritorio obser

mi secretaria-Michele l

or no dice nada, pero no hacía falta, puesto que la marcada vena d

para encaminarse hasta la puerta, antes de salir por la m

mirada lentamente. En ese momento observa a su nuevo jefe y se paraliza, pero la voz d

si quería mantener su empleo. Esos pensamientos absurdos y pervertidos no podían

e era muy intimidante su presencia. Sin decir una palabra la castaña se

llevas trabaja

escritorio para luego sentarse en

ido la experi

nnor me ha t

Ah

su indirecta, lo que le causo bastante curiosidad y termi

percibe que él se aproxima lo que la po

artamudea a

ollado. Le sorprendió mucho para venir de Connor, estaba seguro qu

a, era bastante hermosa, esas curvas vola

iana ensancha la mirada al escuchar esas palabras, su corazón comenzó a retumb

r saliva en seco -. ¿De qué me está hablando?

ajo quedado justo frente de su rostro, ella divisa ese

el pulgar de su mano, y aquel contacto la electrifica por dentro -. Estoy se

a lo que hace que ella diera un respingo... luego extrae el dedo y antes de sacarlo

que mi hijo -susurra sus palabras adm

de agua entre sus piernas. Hasta pudo jurar que mojaría las medias pantys que lle

onrisa que a duras penas se lograba visualizar; seguido de eso acorta el poco el espa

rpo, era como un frio que le corrió desde sus pies hasta su nuca haciéndolo sentir extraño.

de su boca. Su secretaria parecía de hielo, pero poco a poco entraría en calor; aprovech

e y muy redondo. Empuja sus manos hacia su cuerpo haciendo chocar las tet

troduce a su secretaria entre medio de sus muslos. Teniéndola en esa posición desciende con sus manos has

que en vez de reaccionar de otra manera, ella cierra los ojos. Al cabo de unos segundos siente que

de su jefe se deslizaban por sus muslos provocando que su coño comenzara a palpitar

r f

prisiona con un poco más de fuerza sus muslos. Ella gime contra la boca de Mich

nalgas y él las aprieta con violencia, todo su cuerpo se estremece y

la levanta con ambas manos para sentársela en el regazo. Se come su boca mientras que desliza una mano debajo

de su cuerpo, sus pantaletas no eran las apropiadas, la verdad es que

su cuello mientras reparte ciento

contesta con

ombre para luego tomar

o lo soportaba más, ese hombre estaba haciendo mella en ella.

sujeta del mentón para volver a besarla-. No es

o que está

presión en su coño que la hace sobresaltarse e intentar alejarse de él, pero M

bien... -lo empuja p

EO frotando su coño por

e, y no entendía porque, si apenas estaba conociendo a ese hombre. Pero aquel roce la enloquecía, cerr

e con morbo y si