Una esposa para mi hermano
Yo soy tuya y tú eres mío
El camino a reparar tu corázon
Vuelve conmigo, amor mío
El regreso de la heredera adorada
La segunda oportunidad en el amor
Tener hijo con mi mejor amigo
Enamorarme de ella después del divorcio
El amor predestinado del príncipe licántropo maldito
¿Quién se atreve a cortejar a mi reina encantadora?
Lilibeth Domínguez
Voy camino hacia una cafetería muy linda que encontré ayer en Orvieto, Italia es un lugar muy tranquilo y me gusta, tiene poco más de una semana que me mude aquí ya que en mi país no tengo nada que me retenga. Después de la muerte de mis padres me sentía tan sola que necesitaba buscar una nueva aventura, pero nunca pensé que lo que viviría en los siguientes días sería más que una aventura.
Salgo de la cafetería con un delicioso helado cuando veo a un hombre que me corta la respiración, está sentado, pero puedo deducir que mide más de un metro ochenta, es fornido, ojos azules que destacan sobre su piel bronceada sobre todo con ese cabello negro azabache y la mujer que lo acompaña es hermosa en toda la extensión de la palabra, cabellera rojiza, de piel blanca, alta y de buen cuerpo, ya que desata las miradas de todos los hombres que pasan por ahí, nuestras miradas se encuentran unos segundos y siento como un vuelco al corazón, pero yo soy la primera en desviar la vista y después sigo mi camino.