En el segundo en el que le dije a jordán que si quería ser su novia imagine toda mi vida con él, nunca cruzo por mi cabeza que esto tendría fin y hoy heme aquí con el corazón destrozado, Él se ha marchado después de haberme confesado que me ha engañado con otra desde hace seis meses…
Estoy sentada en la barra del comedor con una botella de vino frente a mí, casi me la he bebido completa y las lágrimas no logran salir por mis ojos, sé que tengo el corazón desecho por la noticia, pero entre más pienso porque me hizo esto, siento una ira que recorre todo mi ser.
Jordán ha sido el único novio que he tenido, el único hombre a quien he amado y entregado completamente a él, no pasaba un día en el que no imaginara el resto de mis días a su lado, sé que no merecía esta traición de su parte, siempre lo hablamos dijimos que cuando nos sintiéramos tentados hablaríamos para no caer y estar siempre juntos, vaya ilusa al parecer esas cosas solo las pensaba yo.
Mientras todas estas cosas pasaban por mi cabeza, una idea cruzo por mi mente;
¿y sí salgo esta noche solo con la intención de acostarme con alguien que no conozca?
¡NO MIRANDA!, me digo en voz alta, pero nuevamente la idea viene y me susurra;