Mi vida parecía perfecta, cubierta de lujo junto a Sofía, la poderosa CEO de Bodegas Valdepeñas, aunque yo, Mateo, su marido, era solo un artista perdido en su sombra. Pero una bofetada silenciosa en mi teléfono lo cambió todo: una notificación de un cargo en su tarjeta corporativa, miles de euros para un retiro de lujo en Maldivas, destinado no a mí, sino a un tal Iván, su amante. La confronté, pero su respuesta fue un acto de crueldad sin límites: amenazó la seguridad de mi querida abuela Carmen en Jerez, me obligó a soportar la presencia de Iván en nuestra propia casa, y en el acto más vil, destrozó mi guitarra, una Conde Hermanos de 1958, herencia de mi abuelo y recipiente de mi alma, delante de mis ojos. Ella orquestó humillaciones públicas, como subastar la canción más íntima que le compuse, y finalmente, me tendió una trampa, acusándome de agresión para enviarme a un calabozo y quebrarme por completo. Allí, entre la desesperación y el dolor, me preguntaba cómo una persona podía ser tan monstruosa, robándome todo, mi arte, mi dignidad, mi libertad, dejándome como un caparazón vacío sin posibilidad de escapar. Pero en mi hora más oscura, una visita de mi abuela Carmen encendió una chispa de esperanza al revelar un secreto olvidado: una cláusula en nuestra capitulación matrimonial que, si se demostraba su infidelidad, liquidaría su fortuna y me liberaría. No estaba solo. Una figura inesperada, la brillante neurocientífica Elena de la Torre, apareció como mi protectora, y juntos, con una precisión meticulosa, trazamos un audaz plan para desaparecer y reclamar mi vida, mi paz y, quizás, un verdadero amor lejos de sus garras.
Mi vida parecía perfecta, cubierta de lujo junto a Sofía, la poderosa CEO de Bodegas Valdepeñas, aunque yo, Mateo, su marido, era solo un artista perdido en su sombra.
Pero una bofetada silenciosa en mi teléfono lo cambió todo: una notificación de un cargo en su tarjeta corporativa, miles de euros para un retiro de lujo en Maldivas, destinado no a mí, sino a un tal Iván, su amante.
La confronté, pero su respuesta fue un acto de crueldad sin límites: amenazó la seguridad de mi querida abuela Carmen en Jerez, me obligó a soportar la presencia de Iván en nuestra propia casa, y en el acto más vil, destrozó mi guitarra, una Conde Hermanos de 1958, herencia de mi abuelo y recipiente de mi alma, delante de mis ojos.
Ella orquestó humillaciones públicas, como subastar la canción más íntima que le compuse, y finalmente, me tendió una trampa, acusándome de agresión para enviarme a un calabozo y quebrarme por completo.
Allí, entre la desesperación y el dolor, me preguntaba cómo una persona podía ser tan monstruosa, robándome todo, mi arte, mi dignidad, mi libertad, dejándome como un caparazón vacío sin posibilidad de escapar.
Pero en mi hora más oscura, una visita de mi abuela Carmen encendió una chispa de esperanza al revelar un secreto olvidado: una cláusula en nuestra capitulación matrimonial que, si se demostraba su infidelidad, liquidaría su fortuna y me liberaría.
No estaba solo. Una figura inesperada, la brillante neurocientífica Elena de la Torre, apareció como mi protectora, y juntos, con una precisión meticulosa, trazamos un audaz plan para desaparecer y reclamar mi vida, mi paz y, quizás, un verdadero amor lejos de sus garras.
Introducción
20/06/2025
Capítulo 1
20/06/2025
Capítulo 2
20/06/2025
Capítulo 3
20/06/2025
Capítulo 4
20/06/2025
Capítulo 5
20/06/2025
Capítulo 6
20/06/2025
Capítulo 7
20/06/2025
Capítulo 8
20/06/2025
Capítulo 9
20/06/2025
Capítulo 10
20/06/2025
Capítulo 11
20/06/2025
Capítulo 12
20/06/2025
Capítulo 13
20/06/2025
Capítulo 14
20/06/2025
Capítulo 15
20/06/2025
Capítulo 16
20/06/2025
Capítulo 17
20/06/2025
Capítulo 18
20/06/2025
Capítulo 19
20/06/2025
Capítulo 20
20/06/2025
Capítulo 21
20/06/2025
Capítulo 22
20/06/2025
Capítulo 23
20/06/2025
Capítulo 24
20/06/2025
Capítulo 25
20/06/2025
Otros libros de Gavin
Ver más