Seis años como fantasma, ahora real
A VIL
on del sobre en mi mano al rostro enfurecido de Cristian. Un grito ahogado se le escapó. In
. Su mirada despectiva me atravesó. "¿Estás loca, Jimena? ¿Qué clase de jueguito retorcido es este?
. Considéralo un regalo de libertad. La tuya y la mía". El papel crujió con la
la confirmación de que interrumpí el embarazo". Mis palabras, pronunciadas con una calma
idadosamente aplicado de repente contrastaba con su piel cenicienta. El sobre se
errumpiste... ¿qué? Estás mintiendo, Jimena. No te atreverías". Intentó descart
ecta? ¿Para asegurarme de que tu preciosa Karla no tenga que lidiar con otro de 'mis' hijos corriendo por ahí?
el sobre, sus dedos torpes con el sello. Los invitados, que habían estado susurrando
e entrar aquí, hacer una escena y exigir una compensación? ¿Es eso lo que es? ¿Algún intento retorcido para sa
n parpadeó, pero Cristian no se dio cuenta, o no le importó. Su atención estaba completamente
los papeles. Puedes quedarte con todo. La casa, la empresa, incluso tu pequeño
su embarazo?". "Pobrecita, ¿qué le habrá hecho él?". La lástima
arla y los arrugó en una bola apretada. "¡No obtendrás ni un centavo de mí, Jimena! Y ciertamente no te vas
ando a ti misma. Vete a casa. Podemos hablar de... una compensa
Tú y Karla pueden tener su felices para siempre. Solo necesito que firmes esto. Ahora"
peles arrugados, luego a mí, como si tratara de calcular su próximo movimiento.