Adicto a mi esposa de doble cara

, Kelsey sintió que su telé

la joya que diseñó está lista. Ya fue terminada en nuestra fábrica y envi

a j

ente, había diseñado una pieza y encar

e como regalo de cumpleaños el próximo me

udarlo: "Póngan

a Lawson", fue la r

a a guardar el teléfon

or amiga,

ó la ll

alabra, la voz dulce y apremiant

con una puerta y no puedo tocar el piano por ahora. Al equipo le está c

pondió Kelse

el piano no era n

o un beso enorme!". La voz de Abby, llena de emoción

riño y respondió: "N

lugar en el Ho

y la recibió con

mpo sin vert

mo digo

abía surgido poco después del re

etido en una pelea con unos buscap

nea y desde entonces for

ecía mucho tiempo en un mismo lugar. Para poder ver

or lo que había planeado invitar a Kelsey a cenar, pero una emergen

reocupación. "Amiga,

dido peso; siempre había s

reocupación real, así que desvió la conversación con una sonrisa. "¿No deberíamos ir a prepararnos para el rod

ara la escena", le informó Abby

ndió Kelsey, atenta

ar central en el amplio

rada que le daba una serenata a su novio, enfermo de

vaba y se puso el vestido blanco de Abby. La es

recía la viva imagen de u

y posó sus delicados dedos sobre las teclas,

ron sobre el teclado, tejiendo una tierna melo

sas de quienes se asomaban desde los pisos superiores y deteniend

o las escaleras para pagar las fac

a, se quedó atónito. Su postura era impecable, su cuello, grácil. Mientr

an juntos, Julien se dio cue

saba el tercer año en la Universidad

leto misterio para él, y nunca se

n capricho de una noche que, inesperadamente,

para él, era más una compañía convenient

os privilegios que normalmente a

o la tra

on los regalos y la colm

tuviera caprichos, él estaba m

ro ninguna relación le había durado

nulo interés por los dramas lo que habí

ey como una simple estudiante universitaria, sin

esplandor de una perla. Ese nuevo brillo en Kelsey despertó al

a parecido monótona, de repente se an

teó la posibilidad de

que simplemente no había tenido la oportunid

te increíble! De verdad que me salvaste. Si no fuera por ti, estaría en serios problemas. Todavía me qu

Abby ya se había marchado a toda pris

decidió quedarse a

n la barbilla apoyada en la mano, una

ista y se sorprendió al ver a

brazo, la sacó del vestíbulo y la condujo a un b

o de un cubículo antes de poder proc

a sujetó y la besó con

lla le costó encontrar

el sonido de sus besos e

había besado c

ción inusual, como si estuviera bajo

u cuerpo con una avid

ó, Kelsey tenía los labios hinch

pecho subía y bajaba con agitación, su respiración entrecortada. "No tenía id