La asistente del padre millonario
que solo habÃa salido con él por su fama, para captar la atención de los medios además de su evidente belleza fÃsica. Estaba convencido de q
tu asistente? Si mal no recuerdo, tú te tiras a cualquiera que
a asistente de Liam por cinco años y jamás hemos tenido más que una relación estrictamente profesional, no c
arle tiempo a pensarlo bien, se habÃa sentido ata
cà era implacable, nunca hubiese permitido que le faltaran el respeto
dijo. Ahora, empecemos a hablar del asunto que te ha traÃdo aquà hoy en lugar de cuestionar a mis trabajadores ¿Por qué mierda has esperado
n yendo muy bien que digamos en el trabajo, el modelaje es una industria bastante malagradecida, toma tus año
palabras, ella amaba su profesión casi más que a su
ió que era necesario mencionarme en su
uviera una vida normal dentro de
mbarazo, si nadie se enteraba que tenÃas una hija
enido el descaro de aparecerse como si nada en su vida para cambiarla por completo y no estaba mostr
ares estarÃa bien para darle
ck. No podÃa creer que estuviera pidiendo una suma de dinero tan grande. Era más
lencio, no tenÃa sentido negarle nada- perfecto, te lo daré, pero a partir de ahora,
Margot se abrieron como platos, no e
un hijo, ya no podrás salir de parranda todas las noches como si nada, ni tirarte a una chica diferente cada vez que q
Ãa llegar hasta ahÃ, soltarle una noticia como esa y después querer desaparecer nuevamente? ¿Acaso esa mujer habÃa perdido el sentido común? Tener una hij
ortunidad de escoger el nombre de mi propia hija, no pude comprarle regalos,
! ¡Lo único que siempre te importó fue esta empres
n suvenir? ¿Tú vas a darme lecciones a mà de cómo ser un buen padre? ¡Quizás no hubiese he
a toda voz encolerizado, ya no podÃa esconder más
ida por Rebecca, su voz era tan baja que casi no
escurridiza –dijo Rebecca pasando su mano por el
con el tono de voz más gélido que pudo encontrar, comenzó a decir- Tengo muy buenos aboga
rgot nuevamente, esta vez levantá
esta vez con sus ojitos cargados de lágrimas, asustada por la escena
s continuaban su acalorada discusión. Solo Rebecca pudo darse cuenta de lo asustada que estaba la n
tos y ellos no hacen más que gritarse como salvajes. De
o que de diferentes maneras, el bien de la pequeña ¿No podrÃan llegar a un acuerdo mutuo sin tener que llevar las cosas al extremo? –Margot levanta una de sus cejas y Liam se ve evidentem
se queda sorprendida por el escepticismo de Margot y, por
él notó la cara de preocupación de la pequeña- no te preocupes semillita, te prometo que no discutiremos ¿de acuerdo?