Mi mate, no me ama

o bien..? —me preguntó preocupada exten

í. Tú estás muy bonita en el dí

nos iremos a una manada cercana,

stro hijo. Era verdad, mi hermano mayor estaba

aba con calma. Siempre había sido reser

manera que no fuera, su herm

caminar, estaba un poco aburrida, hasta que fina

me doy cuenta que se

ó Camila, sonriéndome y a

ie de amigas inseparables

uí vivo —dij

sta noche, vendrán todas las manad

cosas —dije me encogí de

posible. No me interesa en lo absoluto, Aunque mi padre

ía que empezar a

un espo

amos destinados a estar solos, era menos la p

había aceptado

ara poder comprar un vestido. En un pestañeo, yo me encontraba

jóvenes que al parecer estaba

ulo el uno con el otro, y o

y ni siquiera eran mates, y otros que simpl

ica —comentó Cam

elta y yo me

a, me invadió. No sabía de dónde venía así que me g

ncon

sujeto en

a ninguna respuesta, y me escabulle e

su cuerpo contra el mío. Trago saliva e

r a ent

én e

es que me llen

idamente y él

mente su rostro

a visto y ahora que lo veí

una de las maneras má

de la Lun

da a regañadientes, porque

con brujas, y por ese moti

a oscura, tal cual este chico. Aunque no

color turquesa extraño; el cual compart

no era la

qué un poco precavida, sin saber muy bien que deci

mente, y él me mir

or mi lado, y yo lo miré sorprend

, de casi me hace explotar el

retroceder con mis propios pas

o, y lo miré con

divertido y yo l

res pequeñ

el otro día en el bosque;

vertirme —dijo y se

molesta, l

anía de esa manera con un chico; lo pe

n contra de mi cuerpo, y es