El Emir

na S

que luego del almuerzo volveríamos al palacio pero no fue así, seguimos pegados como lapas pasando p

principalmente de petróleo y algunos derivados. Es un hombre muy ocupado y trabajador, es

te pregunta mientras me paseo por su oficina y veo todos los

—confieso con t

chica y algunas personas más —. Mi tía Savannah estaba de visita en el país y la que

los viven fu

orna arisco nuevamente y se aleja

ionado ciertas cosas privadas y así, voy viendo otras fot

uchos que aún no conozco y espero no hacerlo, parecen un

toma de la muñeca con la misma fiereza de la mañana y me saca a rastras del edificio. Muchos nos miran pero nadie se atreve a d

itada cuando eres una maldita rehén y no te enteras —brama, da un

ierto abrir la puerta. Da tanto miedo q

asa o tendrás una muy mala experiencia. ¡Deja que juga

a pesar de la nube de arena que vamos levantando

pacio —suplico y a

—añade y sigo sin e

io donde ya nos tienen las grandes puertas a

ido a re

ha cu

stá aquí, vi

conflictos en tus relaciones exteriores con mi país por hacerme esto. No pue

ge y se baja tirando la puerta —.

ó una orden de extracción de uno de sus ciudadanos y

ríe y le señala a Er

s por rotos. No hago negocios con

ánica. Me lo ha dicho ella —le mu

na como si no estuviera en mi misma situa

a el siguiente año. Si lo desean pueden venir por ella entonces, de momento papá y yo hemos d

ar la verdad, sus

itio... y luego tu hermano y los policías

a su príncipe y me quedo de manos cruzadas. Estoy atrapad

es de Alfaslan y Eric están rotas y yo cautiva en la habitació

..maldita seas? —me presiona l

sicamente —. Esto que me estas haciendo es un ultraje

familia pague o yo decida lo contrario... hasta ese

rque me he hecho daño. Él ni siquiera se quej

.

iempo en una esquina, agachada y asustada. Tengo que encontrar

ua al menos, ni nada que no

lo que no puedo buscar aliados en ningún sitio y mi hermano ha vuelto al calabozo na

existe una manera habitual de mantener a un hom

a y la dejo caer al suelo, sus ojos c

—se da la vuelta en su silla —. Prefiero

manos sobre sus hombros y comienzo a masajear sorpre

sobre su oído —. Si hubiera sabido que nunca me darían mi dinero y acabaría bajo las órdenes de un árabe posesivo no hubiese venido. Pref

to —reconoce sin dudarlo y se sac

dejado al apartarse y rujo si

animal y no pienso e

mi nariz —, no puedes desobedecer una sola

e lo entienda y le empujo —,

da y lejos de sentir que eres libre, deberías entender que estás presa en mi palacio, e

hace que vuelva a senta

ntentes que sea algo bueno para ti.

tan i

en habla. Esto no es Inglaterra precio

ida de las acciones: me tiro por la ventana descalza como estoy y sin burka. Sol

lor por las piedras calientes que se me

cuelo en un camión que hay en la cocina, lle

oche me caigo y quedo sola en medio de un desierto oscuro y hostil

la idiotez que hice. No tengo dinero, ni documentos ni ropa

no sé si sea un coche acercándose o caballos. Podría ser

chos dolores cuando algo abrasador me toma p

mordi

é que pasa porque no veo nada pero me duele tanto

fuerte y madura que no reconozco en medio de mi l

rdene s

a confusa se percata de que no es Saamad quien me ha encontrado. La p

ios me lleva