icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Lealtad y Sangre

Capítulo 2 Cautiverio

Palabras:1230    |    Actualizado en: 16/02/2023

a mañana, aquella que solo había dejado más

estaba viviendo Emma? ¿A qué se refería Lorenzo cuando

su pequeña bola de ira, había tenido la precaución de no presentarle a su familia sanguínea, eran un montón de basura que solo le haría más daño que bien, y exponer a su mujer a cualquier t

pero ahora, me parece cómico, sobre todo cuando el l

n solo dedo en cima a

voz que no parecía más

iraba con una engreída y perturbada sonrisa en el rostro, aun así, Adriano jamás dejo de exigir sus respuestas, hasta que finalmente, aque

porque la única forma de romper la voluntad de Adriano Amato, sería ver el cuerpo precioso de su mujer sin vida, y si podía evitarlo, pondría su propia alma a cambio de verla respirar.— Tu pequeña zorra sigue viva, a mi pesar, aun así, he tomado la decisión de tomarme mi tiempo con ella, primero la alejar

engua y luego lo obligaría a comérsela, al terminar, le daría un disparo a su pecho, una muerte demasiado limpia para lo que merecía, pero no que

pués de que Lorenzo se marchar

qué la había rescatado, tal vez su voluntad para luchar por su vida, y golpear con todas sus inútiles fuerzas al enorme sujeto que trataba de drogarla, lo había conmovido, luego de limpiarla de toda sustancia química, le dio una nueva vida, Roselin conocía todos los barrios

pared de ladrillos áspera, fría y húmeda, miro hacia arri

ontestó con s

dice nada…— se lamentó ella con sincero dolor.— él no

re matar a mi esposa. Necesit

, sabes que no pu

hombre herido, lo sabía, por supuesto que sí, le daría cualquier cosa que pidiera, pero no podía traicionar a

ra convencer a su primo, sería estúpido y suicida de su parte, si lo dejara escapar y Lorenzo, no era ninguna de aquellas cosas. Levantó su mano y tomó la botella, bebió el agua de forma lenta

sido más macabro de lo normal, lo había golpeado hasta hacerlo escupir sangre, hasta romperle alguna costilla

pidió ella que estaba al tanto ah

Trato de levantarse, pero no fue capaz. Así que, con el cordón de su zapatilla, Roselin amarró

ído inconsciente de la paliza y al despertar, seguía sin creer lo que había pasado, ¿Por qué? ¿Qué había hecho para enfadarlo así? Seguramente era su culpa, pero Adriano no tenía que pagar por sus pec

yó ella, y su corazón se apretó del dolor. No, la verdad era muy diferente, en aquel minuto le h

engo que hacer.—

Obtenga su bonus en la App

Abrir
1 Capítulo 1 Muerto o No… Siclia.2 Capítulo 2 Cautiverio 3 Capítulo 3 Libertad 4 Capítulo 4 Pequeño ajuste5 Capítulo 5 Amato famiglia6 Capítulo 6 Sospechas de lealtad 7 Capítulo 7 Fantasma 8 Capítulo 8 Vínculo 9 Capítulo 9 Preguntas e incertidumbre 10 Capítulo 10 Sentido de posesión 11 Capítulo 11 De vuelta 12 Capítulo 12 Insuficiente 13 Capítulo 13 Vivo14 Capítulo 14 Celos15 Capítulo 15 Nuestro celo16 Capítulo 16 Amor o Mate17 Capítulo 17 Pasado18 Capítulo 18 El Arno19 Capítulo 19 Aquí 20 Capítulo 20 Ella21 Capítulo 21 Ambos. Ninguno22 Capítulo 22 La esperanza es demasiado peligrosa 23 Capítulo 23 Las cosas cambian24 Capítulo 24 Adiós, la Vita mia25 Capítulo 25 Campo de batalla 26 Capítulo 26 Míos 27 Capítulo 27 Mensaje 28 Capítulo 28 Un lugar vacío 29 Capítulo 29 Desición 30 Capítulo 30 Curiosidad31 Capítulo 31 Instinto despierto 32 Capítulo 32 Naturaleza 33 Capítulo 33 Devoción 34 Capítulo 34 Verdades a medias 35 Capítulo 35 Consciente 36 Capítulo 36 Radio de convivencia 37 Capítulo 37 No eres mía, jamás seré tuyo, pero… 38 Capítulo 38 Algunas respuestas 39 Capítulo 39 Famiglia 40 Capítulo 40 Familia, manada41 Capítulo 41 Nebulosa42 Capítulo 42 Pánico 43 Capítulo 43 Mía Cucciola 44 Capítulo 44 Lazo45 Capítulo 45 Hermoso46 Capítulo 46 Deleite47 Capítulo 47 Ella unió las piezas 48 Capítulo 48 Limite49 Capítulo 49 Quiebre, absoluta rendición 50 Capítulo 50 Sentido de pertenecia 51 Capítulo 51 Reconocimiento 52 Capítulo 52 Ausencia 53 Capítulo 53 Tiempo Límite 54 Capítulo 54 Términos 55 Capítulo 55 Reflexión de fuerza56 Capítulo 56 Solo tal vez...57 Capítulo 57 En claro58 Capítulo 58 Presencia 59 Capítulo 59 Rusos60 Capítulo 60 Sacrificios61 Capítulo 61 Compañeros, amantes62 Capítulo 62 Destierro63 Capítulo 63 Un año después. Hogar64 Capítulo 64 Bienvenido a casa