Contrato Evans

ta llena de furia e indignación—. No me vayas

n descaro—. Deja que te explique —ruego para que

n dirección a Vanessa, quien no muestra ni pizca de vergüenza—. No te mole

r en razón y que me dé

ección a Lucia, así se llama m

s la tomo de la mano para llevarla hasta el

ra que se apiade de mí» Espero que

ada a Vanessa, quien ya se encuentra cambiada, agradezc

ficina y poder conversar en sana paz con mi madre. Siento com

erzo en su brazo—. ¿No me vas a dejar saludar a mi s

—espeto con molestia sacándola de la oficina a empujones—, ni se te ocurr

adie me interrumpa. Cierro La puerta y antes de girarme doy tres res

ara sentarme a su lado y beso su

—se cruza de brazos frunciendo su entrecejo—. Si hubiera sabido lo que estaba pasa

e. —explico manteniendo mi serenidad—. Ella es quien tiene una

a eso. —se cruza de brazos—. Creo que te haz vue

aber lo que es bueno y lo que no lo es. —me levanto caminando

o bueno… —se queda en silencio reparando

observadora, pero para otras no. Me siento nuevamente a su lado para e

e finalmente termino por decirme que hará una reunión familiar para conversar temas relacionados

alir y tengo el presentimiento de que quiere decirme

co con la mirada—. Necesito hablar c

mores. —aprieta mi mejilla pa

lo sabe hacer. Una leve sonrisa se dibuja en

ntrario te vas a ahogar. —apoyo mis mano

me en horas de la mañana. —dice apenada con un tono de nervio

tome la mañana y yo me encargo de lo que se presente, pero que en la tarde

lmente termino por darle la

queda sorprendida porque no tengo mi auto, pues no le explique a detalle la magnitud del choque y que me había quedado sin auto. Lo

nos espera con la puerta abierta para nuestro ingreso. Lo saludo

lo no es mucho lo que habla, has

Agradezco que no siga con su interrogatorio, cosa que se me hace un tant

recibe y Tobías acciona el control remoto para que estas abran,

re y ayudarla a bajar. Con su mano enredada en mi brazo caminamos hasta

e estar. La primera persona que veo es a mi primo Joel con

ima que no tengo alguna especie de poder

cta contra el mío y sin necesidad de

ndo con ella para molestarla, no le gusta que haga eso—.

n dulzura pellizcando mis mejillas—

s en blanco y pellizco sus mejillas haciendo q

molestan esas muestras de afect

da un golpe con su bastón en el suelo—. Va

riarca de la familia caminando al comedor y

s a mi primo y este ni se inmuta en mirarla por estar metido de cabeza en su celular. Creo que es

? —reprende mi tío Antonio—. Respeta la hora de la

o de su saco—. Esto me lo puedes decir en privado, no hay necesidad de que lo h

as. —se recuesta en el respaldo de la silla mientras arregla la servilleta en su regaz

que siento en este momento. De repente siento que alguien da un fuerte gol

encio» O es que ella tiene el poder de leer la mente y no me había dado cuent

tenga que comunicar. El tiempo pasa y lo único que hace es hablar sobre los plane

ntiendo que pueda estar pasando por su cabeza, pero no ha de ser algo b

insistente, estoy empezando a experimentar los efectos secundarios del accidente y para no esperar a que sea peor entro al bañ

a. Pensarán que soy un maldito pervertido, pero es la primera vez que experimento esta sensación y las gan

está afectando, yo pensando en ten

torso. Camino hasta el closet de donde saco un pantalón de pijama, el cual me coloco sin bóxer. Me g

a a pesar de que Aidan me prohibió acercarme a ella. Sé que me conoce a la perfección

28 años no tengo intención de formalizar una relación con ning

o que llama demasiado mi atención. La reconocí por la foto de perfil, comienzo a revisar sus f

su perfil aparece como Sisy Pink. Estoy empezando que a esta mujer le h

aceptar y entonces recurro a buscar sus datos encontrando visible un número te

ue ese número