En busca de la magia

uió, ambos comenzaríamos a buscar creyent

n el palacio, la noche es joven y es el tiempo sufici

comenzar la misión cuando Summer se ace

—dijo Summer mirándome—, pero esos árboles

serio —dije a

ra perder el tiempo discutiendo con ella. El espíritu del verano me agradeció ante

Patrick —l

nada por varios minutos. El silencio resultaba un poco incómodo, aunque siendo sincero no te

erificar la salud de esos árboles. No dejó de asegurar que un

de brazos—, son árboles en zonas urbanas

imismado inspeccionando las r

rlo es la única forma que tienen los humanos de detener la propagaci

n escasos segundos el árbol se desintegr

del invierno mi do

erado—, no importa. An

on una sonrisa de superioridad que duró muy poco. Sorpresivamente pu

iciste? —di

cia. Me sorprendió lo diligente que podía ser ese

anos, pero intento hacer todo lo que está dentro

vándolo de pies a cabeza—, si todos fu

s —me apresuró mientr

estuviese más preocupado que Madre Naturaleza. Mientras volábamos comencé a hacer

zón —dijo Patric

sin voltear a verlo

hermoso de noche,

r y alcé una c

co, las criaturas del

presión de sorpresa y yo s

n esa definición —di

de evitar sentirme culpable por re

dije intentado imitar el tono paternal de Nikolai—, cuand

ro ni tú mismo lo crees —susurró

le en cara el hecho de que ninguno confiaba r

algo,

o una sonrisa burlon

presión, pero al menos h

é por alto ese pésimo chiste si m

i en la cima. Me quedé un par de segundos pasmado

amos habl

la sensación de que tien

a de hacer la pregunta q

con Madre Naturaleza —sonrió, forman

arte sobre ella

ría pedirle que me explicara para poder ent

mer, tú y ella p

a lengua debido a la sorpresa, no e

ue no —dije nega

terrible mirada que dirigías ha

de no las hay. Solo pié

l q

ulo de nieve, sentándom

resoplé demostra

todo no creo que quieres estar

ude evitar pensar en que Patrick tenía algunas

emás, habías dicho que no q

ió—, te quer

asiado controlador de t

olador —se defen

a discusión, dirigí mi mirada hac

r arrogante sí tienes la razón, después

evitado que algunas cosas sucedieran. Ahora más

e qué no sab

o bajando la mirada—, es como

o esa situación, me pregunté si él se c

los humanos —dije restándole impor

he deteriorado. No

rostro, los recuerdos de su aspecto e

asgos son más afilados. Eso podría resultar atractivo par

rlo muy bien, sospechaba que estaba ruborizado. Me aclaré la

es de los espíritus naturales co

tenías los mismos

nreír sin poder evitarlo, ya

s ojos—, eres de los pocos de a

ente porque era el único chico de mi rango de edad con el que había tenido una conversación o solo tal vez porque no parecía u