La Obsesión de Abinadab

a cosa alguna proveniente de ese ser que pudiera ser de agrado para mí, por lo menos en este momento, no siempre fue así, no iniciamos a conocernos con la privación de la libertad, no siempre su prese

rcado, llevaba una doble vida, pero mis intenciones no eran altruistas necesitaba el dinero para alivianar las cargas monetarias de mis

que revisando en tu perfil me percate que eres de origen colombiana y como en unos días voy

ios en su mayoría extrayendo unos cuantos ceros de sus cuentas bancarias. En el caso de las mujeres colocan fotos de hombres atractivos, millonarios y atentos siendo en realidad viejos, amorfos, dependientes de una escasa quincena y hasta casados. El miedo de caer en uno de estos nefastos engaños te coloca en un estado de alerta permanente, algo que caracteriza a estos farsant

ja, me parecía era un chico como cualquier otro de ese país, que viajaría y deseaba hacer nuevas amistades en ese pas

ingenuamente, mientras es

de ser uno de los más peligrosos de Latinoamérica, por lo menos en la capital que es donde resido, los índices de pobreza y delincuencia son bajos… El país es muy grande y

no podía elegir con quien estar, solo aprovechaba a la mujer que deseara su compañía sin importar edad, contextura, rasgos, gustos, capacidad cognitiva o si él ya se encontraba en una relación con otra mujer, si se presentaba la ocasión y cito textual ¡De cucaracha para arriba todo

etidos con los pasos necesarios para que una relación pasara a un siguiente nivel, no hablo de matrimonio ni hijos, sino de algo menos visible, la realidad es que nos apreciábamos pero nunca

alcoba, ingreso la respuesta a lo antes expresado, en lo

argo, no tienes muchas excusas ya que voy a radicarme provisionalmente en la capital… Voy a hospedarme en casa de una tía y a visitar unos amigos… Pero

arle mucho podría permanecer un tiempo más para conocernos mejor, meditaba antes de pensar en u

ago un espacio en mi agenda —Respondí haciéndome la importante,

mí todo un honor conocerte en persona —Escribió s

a cuando llegas a ella. Me fue difícil conciliar el tan requerido descanso y al hacerlo mis sueños estaban inundados de posibles escenarios creados por mi mente de ese tan esperado encuentro, recree desde el más idílico hasta el más hor

le hubiese dado la oportunidad de conocerme o la impresión de que podía llegar a tener una relación con el ¿Estaría ahora mismo en esta precaria situación? Nadie puede saberlo, ya que me entere por su propia boca que antes de buscarme por la red social ya me había seguido meses atrás en mis r

rtad, en escasos cuatro metros cuadrados, con una iluminación pobre, constantes torturas físicas y psicológicas infringidas en su totalidad por ese compañero de historia. ¿Cómo se expresarían de él? ¿Tendrían algo bueno que decir? Estoy casi completamente segura de que no serían nada

e los libros y comí todo lo que pude y lo que no lo enterré en una esquina del cuarto., todo justo a tiempo después de este último acto se escuchó a pesada puerta entreab