El Secreto Entre Los Dos

estigo de nuestro amor infinito, es sentir su piel sobre mi piel y tener la sensación de que toco el cielo con la

y me hace enloquecer al punto que debo morder su hombro para callar mis gemidos, me dejo llevar de

abios mientras que su cuerpo se

por ese sensual tatuaje que tiene en el centro de su espalda alta y que tanto me gusta. Vuelve a grabar la huella de sus labios sobre los míos en medio de un beso i

co tiempo se volverá un tempano de hielo y me abraza a él. —no quisiera hace

ecisamente donde está su corazón y me quedo escuchando el ritmo errático de s

cada vez que estoy contigo. — me susurra a la vez que sus largos dedos se enredan en m

e la felicidad paso a esto cada noche que estamos juntos y

to que las cosas fuera

car. — le pido y es que prefiero tenerlo, aunq

l suelo para comenzar a vestirme —¿puedes escaparte el fin de semana c

— pre

íe —tengo que ir a cerrar un negocio de mi p

pregunto

s y yo, y como sabes, ellos

que me conoc

s? — insiste mientras aho

o, veré si Micaela se presta para d

tierra. Es tan guapo… muero con esos ojos verdes que me miran de esa manera, con su cabello negro azabache desordenado a c

— me dice sujetando mi rostro delicadamente y lu

tu lado… hare todo lo que pueda

am

inar de vestirnos, él se coloca la ropa con la que vi

e? — me pregunta mientras re

a mi departamento, ya es t

y llevarte cerca de donde puede aparecer tu prometido o algu

bien. — digo volviéndom

comida en el refri

puedo encargarme de cualquier cosa que f

me preocupare por ti, eres el amor de mi

a…— rebato y llevo mis ma

lo de

pido y se que, si esta noche no se va de aquí, todo esto qu

dice fi

donde tantas veces somos felices, pero tantas otras me quedo con es

aquella noche donde el amor se apodero de nosotros sin saber ni siquiera nuestros nombres y cuando los supimos, ya era tarde, est