El Secreto Entre Los Dos

os a

de sociedad que me veo obligada a ser para encajar en el mundo en el que se mueve mi padre. Ser la hija de Federico Morelli no es nada sencillo, no solo soy la hija del dueño de la mitad de los casinos y hoteles más importante

lamante socio de mi padre mientras camino por el exclusivo club nocturno que e

icidades nuevamente. — respondo y sonr

ta tanto formalismo, apenas le llevo unos pocos años. — of

digo y miro a mi alrededor —iré a saludar a algunos conocido

en el que no termina de convencerme, quizás es la manera que me m

olitarias barras que hay prácticamente en el fondo del lugar. Se que se supone que vengo en representación de mi padre porque el no pudo venir debido a un via

ease. — le pido al bar t

ser percibida mirando como el chico sirve mi copa —serve another one of those please. — escucho que dice

muy, pero muy guapo…» pienso, pero mis pensamientos se ven interrumpidos por el bar tender quien me entrega mi copa. —thanks. — digo e intento alejarme de la barra, pero

arlo, me encuentro con esos ojos verdes frente a mí. Él me sonríe y no puedo evitar

s solo que no estoy pasando por una buena etapa de mi vida y no creo que es

respeto, eres la mujer mas bella del lugar y estoy seguro de que cualquiera de todos esto

pregunto sin rodeos y

hace un gesto que me parece de lo mas sensu

— resp

nombre.

cias

raza para conversa

y sin mas caminamos por el l

aire seco de la ciudad junto a la infinidad de luces de Las Vegas Strip hace q

o…— digo en

olo que quiero saber si tengo alguna o

es si tienes una oportunidad c

de champagne —así es.

ahora soy yo quien beb

ermosa que vi en mi vida, sino que

oces. — lo

aciendo ahora, ¿no?

cre

novio?

tengo. — respo

na enorme sonrisa t

to cuando él se

. — r

ifica eso?

sa —significa que si consigo tu numero esta noche, podre invitarte a una cita. — res

o… pero m

uir el numero de las mujeres que

cceso a mi celular y pudiera revisarlo, pero mira, a

buena. — come

? — pregun

ero para luego volver a dejarlo sobre la mesa —espero que e

talla. —¿te escribo mañana pa

ándo

cit

i…

rte mejor. — responde y es justo en el momento que quiero

siera presentarte a unas personas

y él simplemente asiente mientras que yo