Dondequiera Que Estés
to la oficina. La singularidad del piso era que las paredes eran todas ventanas francesa
gura esbelta, vestida con un traje informal negro, con una copa ll
n. Se volvió cuando un joven entró en
a de expresión mientras mir
de William era tranqui
muchos periódicos, revistas y programas de televisión han llamado
eguntes sobre este tipo de cosas en el futuro. Sabes, estas ses
hay otra cita. Tiene una cita con el
fue por la tierra en el lado occidental de la ciudad. William so
rande. Se quedó solo unos segundos junto a la ventana. Luego regresó a su
e las ocho, el restaurante
los jóvenes. La comida y
aba sentado allí con una taza de té en la mano. Parecía inexpresivo. Lio
o del padre de William y también sabía que la tierra era realmente valiosa. Si el Grupo Wang tuviera la oportunidad d
udo evitar sentir pena por las personas qu
én se queda con la tierra ", dijo William con voz firme. Estaba tan seguro mientras hablaba. Una sonris
No hablemos de negocios mientras bebemos "
le hubiera pedido que asistiera a la fiesta, tal vez ya se
Al escucharlo, William se distrajo un poco. Sonaba familiar. Aunque nunca le imp
no se habían visto en muchos días, la reconoció de un solo vistazo. Parecía haber
cuando Anne mencionó el nombre de Ivan, Flora no pudo evitar contarle todo a su amiga y empezar a llorar. Para ocultar
encontró primero y leyó el número con atención. "Habitación 201". Ella se rió, señaland
or ningún lado. Dentro había tres hombres se
Flora frunció el ceño confu
osa. Uno de ellos se puso de pie y caminó directamente hacia Flora. Miró con atención a la ext
sola? Únete a nosotros." El hombre sonri
de Flora, se sintió incómoda. Una sensa
a. Si no se hubiera apoyado contra la puerta, ya podría haberse caído. Pero inconscientemente, ya sabía
agarrar la mano de Flora y la atrajo a sus brazos. "Chicos, no esperaba conoc
de los otros hombres con una sonrisa tímida. Se inclinó
hombres, comprendió su intención. Se pellizcó para agarrarse, pero el hombre
r su piel clara frente a él, Pau
metas conmigo. ¡Ana!" Flora gritó de miedo, pero