En sus Garras ❤️⛓️ [En curso]

nd

á he tenido la sensa

zás

zás

ea paran

ente. Nadie sabe lo incómodo que es. Y lo feo que

uladamente, pero nunca me funciona. Pero lo peor es cuando estoy sola en casa, no puedo estar quieta. Cierr

uedarte como que si no pasara nada, disimular, porque tal ves si le

toy l

la hora del recreo y sac

ue siento que me observan, que no me di cuenta que ya había escrito to

do mis libros en mi mochila

ones, pero su voz la escucha lejana-, para la siguien

no escu

do el hecho de que el profesor eligió el aula que está más ale

de las que bajaba normalmente. Por eso odiaba los martes, odiaba las

ales son cuatro-, para ir al aula de informát

a mesa había varios artefactos, parecidos a lo de las computadoras. Recordé que Alex me había comentado de que hoy les enseña

do, porque están viendo su in

n casi a su límite. Él pensó que yo no vendría

uí? -articula

ándote -arti

a el lado opuesto de donde yo me encuentro, segurame

ue me aleje de la pu

ampus de la escuela, es como sentirte como un dios o diosa

ncia de alguien. Sí, es raro. Pero desarrollé esa ¿virtud?. No sé cómo llamarle. Tenía miedo de mirar

se de mí. Mi respiración entr

guarda, si est

, intentando en vano

iel un poco pálida. Estaba vestido con pantalones, zapatos, franela y chaqueta negros. Lo que más me llama l

... Pero eso no es lo que importa ahor

iente como que yo pueda escucharlo.-

rse: casi toda la escuela sabe mi nombre por los retos académicos e

o de voz, con pequeño

a mirada y noto que empuña las manos. Noté

rca. El pasillo se comienza a llenar de gente y de un momento a otro, cuando decido ver si el chico seguía al

me para recoger el objeto del suelo. Me pareció raro el hec

tales colgaban de él; uno de ellos, el del ce

to, debí

elegante como para que a una alumna se le haya caído. Y muy costosa a

beza. Tantas que podría escribo u

eso tenía sentido. Nada

u pelo rubio un poco despeinado, y con su lentes torcidos, probablemente viniera cor

a mano y mi mirada perdida, fingiendo escuchar la

mí, me preguntara una cosa tan trivial como mi nombre, y luego solo

entrarme en mis clases del resto del día. Tengo que comenzar

o se supone que tengo que sentirme con respecto a eso? Estoy emocionada, mucho. Pero a su vez, me siento m

jen y forman una enredadera de lo que parece ser nada en realidad. Mis pen

ca. Lo sé, no estoy

Nos sentamos en una de la mesas redondas. Ambos dejamos nuestras mochilas en

minable, y casi todas las mesas

quina dispensadora, -me informa Alex

ados en grupos grandes; otros son grupos más pequeños. Pero todos en grupos. Hay sólo dos me

al extraño sentado solo en aquella mesa de cafetería escolar, me doy cuenta que va vestido similar

esa también usa la ca

¿Tendrá alguna cicatriz? ¿Alguna marca que le atraviesa el rostro como para que lo esconda tan

tas y tan poc

volteo a la mía. Es mucho más complicado de lo que pensé. Tal vez y sólo t

ría saber cómo me llamaba? Si, exacto. No sé cuál es su motivo de usar su capucha. ¿Intimidar? ¿Esconderse?. No puedo confund

lusiones sin saber nada. Ya es suficiente todo

de la máquina dispensadora con dos bolsas de Do

dy -dice al sentarse. Siempre

nuestra amistad, que es más una

n? -pregunt

ahora no me había dado cuenta que es

n estúpida? Al decirle que no preocupe, se pre

i? -suplico- No t

jor amigo y puedes contarme lo que sea". Bah, si le digo

des confiar en mí...

blanco y me dispu

toy bien

e ve un pequeño brillo en ellos. Pero no un br

-empieza

ado a mi rostro unos

r favor, no

x...

uedo ver el gris en su

e una voz grave, que al in

a tan sólo unos centímetros de donde nos encontramos. Y si las mi

ro una expresión de confusión

s sólo me

ble. Sin expresión alguna. Pero puedo ver el destello de fu

rada: parecen dos perros peleando por un pedazo de car

gías no son

ico de la capucha. Quisiera sabe

tosterona en el cu

ito a

terminar m

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