Viviendo con el enemigo.

xi

ser grosera y asumo que tú tampoco, esta situación no deja una muy buena

pero la sangre se me sube rápidamente al cerebro

qué? ¿Ahor

ey que concretara una cita después de que yo

estabas b

romear sobre algo asi – hago un ademan con las manos, si mi madre cree que le voy a creer este cuentico pue

s, porque podría jurar que de verdad estabas bromeando – ella abre los ojos como platos y

éfono te lo advertí, ¿Por qué hiciste esto? – me llevo dos de

es decir, es una entrevista con un reclutador de uno de los periódic

sí, pe

ajo de las pasantías, has estado haciéndome sentir miserable a mi y a ti misma

hel no entiende y sé que si le digo mis verdaderos motivos por los cuales no quiero venir a Washington ella va a creer que so

ueño de todos los periodis

de brazos y me mira con esos ojo

shington post no

iendo, chasquea la lengu

stada? – me

Qu

stás asus

odría esta

eptar una oportunidad de este tamaño, tal vez crees que no eres

trata d

prender cual es el daño que te estoy causando al haberte traído a c

la guardia – además de no habe

a los brazos y pone sus manos en m

e sucede? Y qu

! ¿Por qué las cuestiones del corazón siem

or Tr

Acaso no quiere que

r quiere que consiga un empleo, pero dudo mucho que él

ria que trabajaras e

a posible – y en realidad yo tampoco quiero estar lejos de él, aceptar un empleo en el Washington post significaría mudarme

su cabeza, de lo único que estoy segura es que no se trata de nad

r en el Washington Post por m

estra relación se a

un lado del restaurante – Max, ¿Tu escuchaste cuando te dije

lo entiendo, lo sé

a tiempo, tú puedes ir a Flagstaff cuando puedas, pero tu no

solo un

conozco la historia de ustedes dos, pero ¿En serio vas

vale l

o por un hombre que el dia de mañana pu

bes que Trev

os que te dije, finjamos que Trevor es el hombre perfecto y que ustedes dos están destinados a ser felices y comer perdic

ambio el peso de mi cu

y en este momento deberías estar explorando cada una de las opciones que la

deje tirado a Trevor y que me

yo propongo es que debes hacer funcionar las cosas de una forma equilibrada, debes pensar en él, p

siento como si ella me hubiera

uir sus sueños y de ponerse a ella por encima de todo el mundo, pensé que tú, Maxine, ibas a salir al mundo e ibas

tan f

no se tú, pero yo voy a volver a esa mesa a cenar con Harvey y Thomas. E

creo que es lo mejor, porque si nos quedamos aquí de pie yo voy a echarme a llorar como si

piel yo me aliso el vest

iódico de la universidad, ¿Por qué no me cuentas un poco más

de la vida estudiantil, algunas cosas

las, ¿Por qué no

comienzan a revolotear – sí, puedo enviar

os literarios, de algunas experiencias universitarias, incluso hablamos de las próximas elecciones p

mi familia, si no porque estoy con un hombre que cree que mis palabras son brillantes, un hombre

ngo de hacer la maleta y mudarme a la capital para rogar por un

legirme a mi sobre Trevor o sobre nuestra relación, pero es que: ¿Qué hace