De Granada a París.

bri

uiero. Me desconcentro en clases, por la noche lloro —y ya no sé si es por Sam

los contenidos de las clases. Tan solo falta una seman

n Sam. Se puede decir que lo he evitado, aunque él no se ha dado cuenta de eso, piensa

ores dando actividades para el estudio independiente. Abro la pu

frente, para e

do y saco el cuaderno para comenzar a apun

tura y saco mi teléfono que ha estado vibrand

lla y veo ocho llama

ara volverlo a guardar vuelve a sonar, a

ire y c

do, mientras camin

dos horas buscándote

en el aula de literatura —digo con divers

onozco y no me cabe duda de cuál fue

a mi casa hoy para estu

jo. No te preocupes, pásalo con Lana para que no estés

cualquier c

. Cuí

ambién

fono y lo guard

onamiento de la escuela y ahí

guant

Lana no me ha dicho nada. Pien

llamo mi amiga me o

ma bajándome por la mejilla y

el chico que me escribió la otra

o el rostro porque no quiero que me vean as

siente —susurra sobre mi cabe

torso con

é que hacer... —no s

por la barbilla y

llos —limpia mis lágrimas con sus pulgares y me da una pequeña sonrisa—. Si quieres, estoy aquí para tí —fr

Oh

cuando quería que fueras mi amiga no es tu novio, ¿verdad? —hab

uién estoy enamorada —suelto c

taba mirando, yo no me atrevo a girarme

de ellos, porfa? —s

ar una maltead

Siempre v

erca de la escuela pedimos nuestras maltead

de los gays, cada cual tiene sus gustos y para gustos los col

reloj y abro un poco los ojos—.

iento de la escuela está mi

—

ese momento estaban cerrando, menos mal que el gu

ga un casco y e

Yo también me subo y el com

renalina a mil por hora y una sonri

ajo de la moto. Él se quita el

casco—. Por todo, me ha

úmero, solo tienes que desbloque

o vemos

¿Ok? —asiento y él se vuelve a poner el casco,

, con una sonrisa en los labios y a

equeño brinco en el lugar y

o —me toco el pecho y respiro pausad

ofá individual y se para delante de mí, intimidante—. ¿Por qué

so de malo? —me encojo de hombros y

scribió, diciéndote que ibas a ser su novia —me recrimina y yo

sorpresa porque no le doy la razón—. Era u

igerador, dejándolo co

so

No te gusta para mí o alguna mierda de esas? Si te dijera lo que me gusta y

o... —suelto una risa cínica y me

res al beso

s estantes para

i... Me co

no tiene porqué confundir

o y le doy un sorbo, mirand

a mí y me quita el vaso de los

ite —cambia el tono de voz a uno más bajo y qu

es como le dices a Lan

a seguir haciendo porque eres mi pequeña —se queda

es así. Bueno, si me besa, pero en la frente, quedándose

aya —se separa de mí, pasánd

eso

risteza se gira para ma

ecto que se quede des

nes para salir de mi cuarto. Sol

mi estantería de libros, buscan

Afuera acechan los demonio. Es de un escritor cubano. Mamá me dij

go de comenzar a leer, tocan el timbre de la

á no

mundo las escaleras que llev

ta en el lugar

edo pasar? —me ap

o, Lan

a puerta y me siento en el s

Quería dec

es, ya lo sé —f

me voy a secar

y André somos los únicos que sabemos

ntenta hablar pero me le adelanto—. Sé que te dije qué me gustaba, mas, ahora c

ero

relación con eyl, ¿sí? —asien

sonrisa y ella sonríe también,

haría mi mamá o André, a Sam lo excluyo d

e voy a leer —pronuncio y me l

stás ec

a leer —digo obvia y

más los libros

a razón y ella

. Está precioso. Voy por el capítulo veintic

tam

ine por Hasley, eso fue

no lo podemos s

equeño spoiler del capítulo treinta y uno. Mi mente

y a ver a mi novi

nos

i lado pisa los trozos de mi corazón que no había

los paquetes de gominolas, llev

mi teléfono se enciend

hoy. Vamos a ir a un río que no es

e ocurra venir,

uedar llorando como una mocosa

ble y te estoy od

tu mamá, no quiero que me apresen

dré. Necesito un descanso

ando p