El Deseo de una Pasión

us ojos están fuertemente acentuados, con un predominio marrón, y sus lab

perder el control y meno

luego mis dientes apretados, haciendo en puños mis manos, aunque no negaré que

rpadear nerviosamente, como

imas de

me consume, sintiendo las ga

gues —hable entre

e levanta para luego inclinarse y p

tarla, pero si ella sigue insistiendo e

mi despacho —vociferó

o y diciéndole todo lo que tengo guardado en mi interior. Hace meses que me dije q

con ciento de mujeres, pero mi cruda realidad es que ninguna

ega con l

a al ver que ella no obedece a ninguna de mis exigencias.

é has

tir como mi estómago duele—. De verdad te amo y por es

haces en mi despacho —doy dos pasos adelante—. No me importa si mi familia te ac

—rodea la mesa y a paso

so o no pienso, ¡quiero que te ale

porque yo te amo y jamá

on ciertas —al verla a unos centímetros de mí la empu

no entiende que cerré todas mis puertas para ella, no entiende que su

el cual dijo que no estaba segura de lo que hacía porque no sabía si era

ene una explicación —

nos, obligándole a alzar la vista hacia mis ojos ardientes. Ella jadea complacida y mi boca se abate sobre

entrelazo las manos en su cabello y tiró con fuerza. Ella jadea y ese sonido sexy del fondo de su

eda entreabierta e intentando recuperar el aire para protestar—. Ere

ocoso —Máximo

a lado de mí para posarse al lado de la chica de mis mald

mi cambio de humor, pero lo que no saben es que ella se

bien —sisea

está bien y te puedo jura

sonales fuera de este despacho, ya qu

trabajo y si no me equivoco ese trabajo incluye a la persona que no quiero ver. ¡Mierda!, quien

na vez Máxi

—dice seriamente y

mi sonrisa se borra al ve

o sería mala idea que unamos el a

doy vuelta y vuelta al asunto hasta recordar que ese ap

fo—, no necesito ca

conveniencia de tu imperio —siento la mano de mi

ía en el siglo dieciocho, donde se hacía un matrimonio arreglado, pero

ptaré —intento alejarme, pero la mano de mi padre me

solo será por un año, n

n

y quiero que tengan presente que todo será el b

inversa, con el fin de obtener lo que quiero. ¿C

que ella se interpusiera o dijera algo, pero al parecer l

r a casarme con una mujer d

verás obligado a elegir a

ren a este negocio, ¿cómo me pueden quitar e

a decisión precipitada, pero no puedo perm

de gobernación —volteo a ver a mi padre—. Quiero saber

ura esposa —conte

iseo tras apret

gan que todo esto es una maldita broma, pero lastimosa