Segunda oportunidad con el amante despechado
ó el brazo del hombr
ocó, una oleada de debilida
terminado. No puedes...", susurró el
no que le sujetó la barbilla con u
innegable. "No termina hasta la medianoch
ño, un gesto que reve
guntó por qué seguí
a. Apenas media hora antes, había llegado con la intención de
lencio; sus acciones, como un decreto, rompieron la quietud. Sin
a lo largo de tres años; un tiempo que
, cedió sin oponer resistencia. Se hundió en el calor que crec
r retumbó a
avor, no me dejes marcas", susur
sponder, no con palabras, sino con una renovada oleada de pasión: un
ducha y se miró en el espejo. Las marc
, Carson fumaba con
ima del hombro. "¿Estás segura de que no quieres renovar el a
na ti
or muerte de su padre y la enfermedad de su madre la obligaron a esconderse de los acreedores mientras lidiaba con abrumadores gastos mé
suerte en medio de la desesperación. El acuerdo era tran
s extrañas. Además, cubría generosamente los gastos médicos
revisto fue la profundidad de los s
, también se había ad
ría el
ta la ato
lencio. "No. La salud de mi madre está mejor
n se acercó hasta coloca
pregnó el aire con un aroma
ta sonó casual, pero fue incisiv
ndió ella e
es bien?", i
sentimientos pueden evolucionar", observó Johan
s personal. "¿Y qué hay de l
na mientras respondía: "Ambos somos jóvene
rio, afirmó: "Carson, est
casas, pero estaban ca
na mezcla de ultimátum y súplic
staba teñida de sorna. "¿Por qué nunca considerast
nte su burla fue una tác
uedaron peligrosamente cerca, con una
ron, delatando su intención de a
su avance y señaló el reloj,
ban una finalidad irrevocable. "Ya es más de
ea de nuevo se
una risa suave, imperturb
Su voz era una mezcla de admiración y despr
que subrayaba la dinámica de poder entre ambos. "Si alguna vez necesit
con un tono que era a la vez tierno y distante, lo que
entre ellos y la atmósfera se enfrió, marcand
ntonces su fachada se derrumbó. Las lágrimas corrieron por su rostro mient