Su esposa no deseada y verdadero amor
e Desmond, su hijo mayor. Durante años, él me prometió un futuro, una vida e
ondría matrimonio, me presentó a su prometida,
é de él, pero pronto descubrí que solo era una pieza en su juego: estaba secretamente
señores Morgan anunciaron que me casarían con un magnate tecnológi
tida de Desmond, y vi cómo ambos hermanos, el hombre que una vez amé y el que
activo comercial y, en última instancia, un sacri
n un desconocido, saqué mi celular y borré todo rastro de la familia Morga
ítu
dor contra sus costillas. Esa noche, el majestuoso comedor de la familia Morgan estaba
ojos. Durante años, su amor había sido un secreto, un hurto de una casa donde ella siempre fue c
abía prometido una velada especial, una verda
lo de mármol. Dallas se dio la vuelta con u
zo de él. Chelsea Taylor, la hija de un empresario tecnológico. Era hermosa y compue
misma voz que usaba en las salas de junta
como un golpe fí
ño destello en los ojos de la otra mujer, una breve evaluación posesiva que desapareció enseguida. Dallas no tardó en adoptar su postura
ocerte, Chelsea.
ngún momento, por lo q
dulce como la miel. "Desmond me ha hablado dem
mana. Era un
ión de invitados, Desmond se encontró con Dallas en el jar
a los ojos. "Es un acuerdo de miles de millone
preguntó ella en un su
a mandíbula apretada. "Pensé que tú, d
arte comprensiva y conveniente de su familia, no alguien
spondió Dallas
alivio. "Bien, sabía
asa, dejándola abandonada en la oscuridad.
la mansión Morgan como un espectro. Su corazón era una piedra pesada y entumecida en su pecho. Comía cuando se lo decían, sonreía cuando se espera
contemplando los jardines cuidados, cu
ecesitar u
ra el espíritu libre de la familia, un músico con una sonrisa encantadora y una risa qu
chaqueta sobre sus hombro
remeció, pero
ond", comentó con sim
ía permitido derramar nubl
u brazo con el pulgar. "Te he observado durante años, Dallas.
rostro sincero y apuesto, una pequeña y frágil se
to como Desmond. Era am
nciones que había escrito "solo para ella", y la escuchaba durante horas mientras ella desahogaba su corazó
ndo lenta y cu
privado que había alquilado. Sabía que ella am
o", comentó, con un brazo envu
en nada a los besos calculados y posesivos de Desmond. Er
contra sus labios. "Déjame
taba en sus brazos, en una relación que se sentía como un salvavidas. Fu