Su Amor Fatal, Su Amargo Final
de donante y salvarme la vida. Él era mi héroe, mi mundo entero, después de que
protegiendo todo este tiempo. Ella era
ientras los matones de ella me golpeaban y me arrastraban detrás de su coche. Me obligó a arrod
bé" que yo había "asesinado". En su yate, la sostenía a ella en su
a "accidentalmente" al océan
ltarás a busc
tro de mi esposo, el hombre al que
me arrojé a las
ítu
mente segura, s
s ojos tenían una seriedad que corta
y. -Mi propia voz era un susur
irtió tres años y una cantidad astronómica de dinero para encontrar este corazón para usted. Él financió personalmente el ala de
ser un salvavidas, pero
más urgente-, su corazón fallará. Basado en su condición
. Un mes. Parecía una eterni
a en un punto justo por encima de
ro. Veía a una mujer frágil, la amada esposa de un multimillonario de la tecnología, renuncian
á que firmar esto. Es un relevo de responsabilida
o se mantenga confidencial. Mi esposo no debe ser informado de mi
ro yo solo lo miré. Gu
Luego me levanté y salí de su consultorio, mis paso
ta el último piso, al ala VIP privada que Álex prácti
o a su riqueza y, alguna vez c
mbido del equipo médico. Durante tres años,
rrame cerebral masivo. Está en estado vegetativo pers
y caminé hasta su cama. Tomé su
do en la garganta-. Lo si
mi culp
seo de la Reforma que él diseñó sufrió una falla estructural catastrófica. La investigación apuntó a inform
ía apadrinado y tomado bajo mi protección. Su nombre era Karla Sánchez. Ella fue quien
so. Invertimos millones en investigadores pr
as demandas llevaron a nuestra familia a la bancarrota. Mi madre, abr
e, lo pe
és de todo. Él era mi
a, te lo juro, encontraré a Karla Sánchez. La haré pagar por
elo, él era mi única luz. Me afer
s antiguas. En cambio, encontré una carpeta oculta. Dentro había correos electrónicos y estados de cuenta. Transfer
azón, ya débil, se sintió como si
e dormida, mientras él me abrazaba y juraba vengan
tonta. Toda la búsqueda fue una mentir
viviente. Todo porque confié en el hombre equivocado. To
rdíaco junto a la cama de mi madre de repente
eeee
Mi cuerpo se puso rígido. No po
de la habitación. Me quedé en el pasillo, una estatua hueca, mis dedos marcando
se cortó. Un momento después, su
saje de texto. Era de un núm
e abultado. Debajo de la foto, el texto decía: "Álex y yo estamos muy emocionados de dar la bienvenida a
médico salió de la habitación de mi m
o, señora Villa
is uñas se habían clavado tan profundamente en mi palma que la san
ltimo pariente de
ncliné sobre el cuerpo inmóvil de mi ma
ada-. Ya voy. Espérame. Volvere
con una insensibilidad mecánica. Mi mente era una venti
er la verdad con mis propios
e Álex: un lujoso y privado centro de maternidad. A través de los
nte en su embarazo. Miraba
tora en su espalda, una suave sonrisa
vez -se quejó Karla, apoyándose en él-. Y e
olvió el estómago. -Eso significa que es fuerte. Va a ser u
ndo escondida así, todo por culpa de los Herrera. Pero ya se acabó
abía prometido un
lsas. -¿Pero qué hay de Elena? Me siento tan
ú fuiste una víctima. Y ella... ella lo entenderá. Me aseguraré de que esté bien
en su pecho, una sonrisa triunfante
orda. Era un desgarro físico. Cada palabra, c
No quedaba nad
me quedaban por llorar. Había un lugar que conocía, un mirador donde Álex
perfecto pa