Esposa Traicionada, Venganza Ardiente
ional la había dejado físicamente agotada. Cayó en un sueño
stro una máscara de pura furia. La agar
gruñó, con los o
ndo? -murmuró ella,
l! ¡Intentaste envenenarla!
absolutamente infundada, que Sofía
locura. Nunc
Puede causar un aborto espontáneo -bramó él, su agarre apretándose-.
arquitecta de software, podría siquiera conseguir una "hierba rara". Ya la h
su amor por él se conv
a de adrenali
tu hijo! ¿Por qué estás tan obses
ro se o
o, Sofía. Irracional. Cruel. Me
o -dijo ella, su voz
, agarrándola del brazo de nuevo-. Vas a
ligó a subir a su coche. El viaje al
almohadas blancas. Tenía una intravenosa en el brazo, aunque la bolsa era
é la trajiste aqu
Ricardo, empujando a
ente a ella, a este extraño que fue tan rápido en creer lo p
ada de qué
un susurro bajo y venenoso s
creerá. No te am
rla, pero hicieron lo contrario. Cortar
Sofía, mirando de Bren
ta y salió de
lve aquí! -g
, pero Brenda solt
mi estómago
egundo. Luego se volvió hacia la
nal fue demasiado. El mundo se inclinó, las luces del techo se convirtieron en ra
ma de hospital. Una enfermera est
ión, señorita. Le hemos puesto líquidos.
cama. Él no había venido por ella.
voz hueca-. No
Entró y encontró a Ricardo y Brenda riendo y compartiendo una com
eguntado. Ni siquiera se habían
a vista, su expre
do así sin decir una pala
eocupado de que causara más problemas? ¿Preocupa
a preocupa
ntregado su corazón, y no sintió nada más que un vasto y frío
nó hacia el dormitorio,
está equivocada aquí! ¡Intentaste dañar a mi esp
aldas a él, y dijo las palabra
abó, R