La Venganza de Helena: Un Matrimonio Deshecho
pañé desde que era un joven representante estatal hasta convertirse en una persona cuyo nombre se
fosforescente con una joven, Kandy Mays. Su rostro estaba iluminado con una alegría juven
de eso, no hice una escena, sino que me alejé. Mis tacones sonaban con firmeza, sin delatar el caos que se agitaba en mi interior. Seguramen
él quería hablar, dar el golpe final, pero yo me adelanté y saqué una carpeta de mi escritorio. Luego,
u plan. No se podía divorciar de una esposa moribunda. Estaba atrapado. El peso de su image
n silenciosa. A la mañana siguiente, mi sobrino Jared llamó. "La echó,
ítu
a un hombre cuyo nombre resonaba con respeto en los pasillos del poder. Se retiró con una generosa pensión y un asiento en las junt
ante, la pareja perfecta que suavizaba su arrogancia con un
del centro. Su rostro estaba iluminado con una alegría juvenil que no le había visto en veinte años. Compartía un batido verde fosforescente co
No era solo una aventura,
nombre Baxter. Lo supe con una certeza que me heló los huesos: buscaba una nueva vida en ella. Su nombre, él lo había mencionado una
es de que pudieran verme. Mis tacones sonaban firm
l arte a quien podría descartar con un pequeño acuerdo y una p
poso, quien le era infiel. Las últimas palabras que me dijo se convirtieron en mi religión: "Los hombr
nte veinte años,
o con romero y limón. La casa olía a confort, a esta
ar el golpe final. "Helena, necesitamos hablar", me
io; mis movimientos eran calmados y deliberados. Saqué una sola car
o. Luego lo miré dire
za. "Pancreático. Los doctores dicen qu
a. No era amor ni preocupación, sino la destrucción repentina de su minucioso plan. No podía divorciarse de una esposa moribunda; se
ndo mis ojos. Se retiró a su estudio y el c
mi sobrino Jared llam
do desconsolada en la calle. Después él llamó al agente in
do la prim