El precio del Amor
aún sentía el peso de los desafíos pendientes. Los números no cerraban, los competidores estaban al acecho y la expansión en Asia parecía más co
cción habitual hacia su penthouse. Apenas había pasado una
ra. Dice que es urgente
rumpía fuera del trabajo, y mucho menos en un momento como este. Miró
"Que
el cabello mojado pegado a su rostro. Sus ojos reflejaban una mezcla de ansiedad y
guntó Álex, sorprendido, mient
iento por presentarme así. -dijo, con una ligera s
vez que la veía tan vulnerable. La gente como él y como ella no solía mo
l salón principal, la condujo a la sala de estar, un espacio amplio con vista
los sofás de terciopelo gris, mirando a Álex
ntó él, sin aparta
Álex le ofrecía, pero no la aceptó. Estaba demasiado agitada para pen
hermano. Elisa nunca había hablado de su familia, y este
tando que la atmósfera en l
no tenemos contacto, pero hoy me llamó. Me dijo que tiene información que pod
un eco en la sala, y Álex apretó los
mbio? -preguntó con frialdad,
s ojos, y por primera vez, él p
lla hizo una pausa, luchando con sus palabras-. No puedo pon
adraba, algo en la manera en que Elisa lo decía lo hacía sentir incómodo. No solo estaba luchand
protegerte de tu pasado si no me dice
o. Álex dejó la copa de vino sobre la mesa y se acercó a la ventana. La lluvia seguía cayen
da, Javier... tiene conexiones con la competencia. Mi hermano está atrapado en algo mucho más grande de lo que im
era más vulnerable aún. Él siempre había manejado el contr
decidido. Se detuvo justo frente a Elisa, su mirada fija en la suya-. No voy a dejar que nadie
zado una línea que tal vez no podría deshacer. Un suspiro escapó de
er. No quiero perderlo todo. -
ba a cambiar. Algo que no quería admitir, algo que nun
te digo, te protegeré. Pero todo esto
sus ojos. No sabía si podía confiar completamente
o. -dijo finalmente, con
ró. Un mensaje. Lo miró rápidamente. Era
estado intentando infiltrarse en nuestras redes. Nos acaban
inmediatamente, y sin pens
uí ahora mismo. -dijo, con una
preguntó ella
solo tu hermano está involucrado. Javier ha estado mucho más cerca de lo qu
o que Álex había construido estaba en juego. Elisa lo seguía, sin hacer preguntas, porque al